Una vez más, el río Táchira registró aumento en su caudal, a causa de las lluvias en la cabecera, lo que ocasionó que decenas de venezolanos quedaran varados del lado Colombiano.

Después de las 5:00 p.m., autoridades habilitaron el paso por el puente internacional Simón Bolívar para que las personas fueran ingresando por el tramo binacional que, en la actualidad, funge exclusivamente como canal humanitario.

Trochas como La Platanera y Centeno se hallaban cerradas. Otras, como la de El Palotal, se encontraba activa, pero con balsa. Las Pampas, a las 6:30 p.m., también estaba activa, pero con riesgo a ser cerrada en cualquier momento por lo caudaloso del afluente.

“Gracias a Dios nos están permitiendo el paso por el puente. El río está muy crecido y es un gran peligro atravesarlo así”, resaltó una dama a la altura de la aduana principal de San Antonio. “Acabo de pasar”, recalcó.

Jonathan Maldonado