Recordaron que son el sostén de sus familias y requieren llevar, a diario, la comida a sus casas
Jonathan Maldonado
«No nos dejan trabajar». Con esta frase, mototaxistas que hacen vida en La Parada lamentaron este lunes 25 de septiembre que la Policía de Colombia no les permita ofrecer el servicio de transporte público.
Alegaron que son el sostén de sus casas y, desde que abrieron el puente internacional Simón Bolívar, el pasado 17 de febrero para el paso de vehículos, se han ido organizando para atender a los clientes que desean cruzar el tramo binacional en vehículo a dos ruedas.
«La policía no nos deja trabajar, no son conscientes de que estamos prestando un servicio a la comunidad por tan solo 3.000 pesos hacia la aduana principal de San Antonio o hacia la Redoma del Cementerio», apuntó Jennifer Ortega, mototaxista.
Yixon Barinas, mototaxista, recordó a las autoridades colombianas que la situación por la que está pasando Venezuela es bastante compleja, en materia económica, razón por la que muchos ciudadanos se ven en la obligación de sacar sus vehículos para ofrecer una servicio, «ya sea a los hermanos venezolanos o colombianos».
«A los clientes les garantizamos las medidas de seguridad, les ofrecemos el casco, vamos a una velocidad adecuada, peno no nos quieren ver aquí, orillados», recalcó.
Los mototaxistas dejaron claro que, con su servicio, evitan que las personas pasen a pie el trayecto internacional, lo cual es un peligro lantente por la cantidad de vehículos, entre ellos gandolas, que transitan por este punto.
«Nosotros sacamos el vehículo porque en Venezuela no hay trabajo, no hay nada que hacer. Nos toca llevar el alimento a la casa», enfatizó Jonathan Gracía, mototaxista.
Aunque la modalidad de mototaxista no está estipulada en la ley colombiana, en los últimos meses las autoridades les permitían prestar el servicio desde La Parada y hasta San Antonio. «Ahora, no nos quieren dejar», reiteraron los trabajadores.