La madrugada de este miércoles, 20 de abril, un aguacero interrumpió el sueño de muchos en la frontera, mientras otros lo percibieron desde el principio, pues se hallaban desvelados por el acostumbrado corte de cuatro horas en ciertas sectores: de 11:00 p.m. a 3:00 a.m.

Pese a lo intenso y prolongado, el río Táchira no registró una crecida preocupante. El nivel del afluente se encuentra normal, pero con un color amarillento en el agua como consecuencia del lodo arrastrado.

Las trochas, entretanto, siguen abiertas, pero con dificultad para el tránsito debido al barro que se forma en las sinuosas rutas cuando llueve.

El llamado de las autoridades es a estar muy atentos, pues se estima que las lluvias persistan en las próximas horas.

Jonathan Maldonado