Frontera
“Uno corre a desconectar todo”, dicen los habitantes de la frontera ante ‘bajones’ eléctricos
7 de mayo de 2020
En cuanto al servicio de agua potable, vecinos señalan que en algunas zonas ha mejorado mientras en otras persisten las fallas
Jonathan Maldonado
A Teresa Sánchez, habitante de Cayetano Redondo, en San Antonio del Táchira, se le quemó en días recientes su televisor como consecuencia de los constantes bajones de electricidad.
Desde la vereda 17, donde vive con sus hijos y esposo, precisa: «si uno no tiene para comer, mucho menos para mandar a arreglar un televisor». Sánchez asegura que estos escenarios se repiten en muchos hogares. «A mi mamá se le quemó la radio», dijo.
La dama lamenta que no haya respuestas oportunas por parte de Corpoelec. «¿Adónde vamos a parar con todo esto?», se preguntó, angustiada, quien tiene más de 10 días sin recibir el servicio de agua potable.
Una vez comienzan los bajonazos, Sánchez corre a desconectar todo para evitar que se repita el episodio del televisor. “Hemos pasado muchas necesidades. A veces mis hijos se acuestan sin comer”, señaló.
Para José Rafael Díaz, residente del barrio Lagunitas, las cosas van de mal en peor en materia de los servicios. “Estamos viviendo una situación caótica con respecto a la electricidad. Eso es en todo el país, y en Táchira, peor”, aseguró.
Díaz, de 59 años, detalló que desde hace varios meses tiene su nevera daña a causa de un apagón. “No he podido arreglarla porque no hay trabajo. Vivo de la caza y de la pesca”, ironizó.
Con respecto a la cuarentena, indicó que la gente, en el municipio, ha cumplido. “Se han resguardado”, acotó mientras recalcaba que en su sector ha contado con agua. “La están poniendo cada tres días”, aseveró.
“En algunos sectores se intensifican más”
Gustavo Chacón, de 58 años, lamentó que las fallas eléctricas, y en especial los bajones, persistan en la frontera. “He tenido experiencia de equipos que se han dañado: aires acondicionados y un congelador”, dijo.
Chacón subrayó que en la frontera las fallas eléctricas no son iguales de frecuentes en todos los sectores. “En algunas barrios son más reiterativos que en otros”, añadió mientras resaltaba que, en su zona, el servicio del agua se ha regularizado.