Por aire y por tierra, países como Brasil, Chile, Perú, Uruguay, Colombia, Estados Unidos, Sudáfrica y Gran Bretaña se han unido a la búsqueda del submarino ARA San Juan que desapareció con 44 tripulantes.

A remotos 432 kilómetros mar adentro, el pasado miércoles ocurrió la última comunicación del submarino, a 240 millas más adentro del Golfo de San Jorge, en Argentina.

Para el operativo de rescate la Armada ha desplegado 13 buques y seis aeronaves, tanto nacionales como extranjeras, activando un área de rastrillaje de 306 por 216 kilómetros, partiendo de la última posición del submarino.

Despliegue nacional y extranjero
Entre los buques destacan dos destructores, seis corbetas, cuatro buques logísticos y oceanográficos, así como un buque polar británico.

Asimismo, se conoció que desde la Base Naval de Mar del Plata, salieron los buques científicos Austral y Puerto Deseado y la corbeta Espora, y la corbeta Granville.

La Marina de Estados Unidos desplegó un avión marítimo P-84 Poseidón con 21 tripulantes.

Desde Río de Janeiro zarpó el navío de Socorro Submarino Felinto Perry (K-11). Desde Malvinas, los británicos mandaron su avión Hércules.

Del mismo modo, participan las corbetas ARA Rosales y ARA Drummond, el destructor ARA Sarandí, un avión Tracker de guerra antisubmarina y un B-200 de vigilancia marítima, todos medios de la Armada.

También desde la base naval Puerto Belgrano salieron otros tres barcos: uno logístico, el Patagonia, y dos corbetas, la Robinson y la Parker, sumado al Hércules TC-69 de la Fuerza Aérea, recientemente modernizado y en operaciones desde 2016. (1 avión), y un avión P-3 Orion de la NASA, que cumplía una misión de investigación en la Antártida.

Se sumó un buque polar de origen inglés, el HMS Protector. Desde la base de Ushuaia zarpó el aviso Puerto Argentino, que va a operar desde Comodoro Rivadavia, y también está el aviso Islas Malvinas y el transporte San Blas.

En el operativo también se incluyeron aviones de Uruguay, Brasil y Chile, así como entre 20 y 25 pesqueros “altos”, los de casco rojo, que partieron de Puerto Madryn, quienes participan de la búsqueda en altamar.

Los familiares, por su parte, se aferran a los siete intentos de comunicación por vía satelital realizados desde el submarino ARA San Juan, y que fueron detectados la noche del sábado por la Armada.