Internacional
Alcalde de Cúcuta propone brindar albergues temporales para venezolanos
16 de enero de 2018
“No comparto que demos desayuno almuerzo y comida, porque ahí sí vendría muchísima gente a vivir acá; solo quiero dormitorios”.
Así, el alcalde de Cúcuta, César Rojas reiteró que la única salida para atender a los inmigrantes venezolanos que pasan las noches en la calle es brindar albergues temporales que garanticen condiciones de vida más favorables a los cucuteños y a los extranjeros.
“No podemos seguir viendo esos espectáculos de niños durmiendo en la calle, porque hay un Estado que no da garantías, que no propone nada y cada día oprime más al pueblo venezolano y ellos tienen que venir a Cúcuta a buscar sustento”, declaró el mandatario.
Agregó que si se consolida la propuesta, mejoraría la convivencia en los sectores en los que se asentaron los inmigrantes, pues se busca una solución temporal a su estadía.
En este sentido, enfatizó en que los inmigrantes tampoco podrían tener estatus como refugiados, porque “allí no hay guerra de militares contra civiles, sino una opresión y políticas públicas del gobierno venezolano que no comparto”, citó el diario La Opinión de Cúcuta.
Así mismo, se mostró confiado en la respuesta del Gobierno Nacional para resolver la estadía de los venezolanos, y aunque señaló que “es un gobierno que ya se va, tiene un compromiso, y a finales de la semana dijeron que me tendrían una respuesta para que empecemos a trabajar”.
Por su parte, el concejal de Cúcuta Jaime Marthey respaldó la propuesta de Rojas, en el sentido de brindar albergues temporales, porque “establecer albergues permanentes genera un caldo de cultivo para incentivar la llegada de más venezolanos”.
“Deberán ser albergues de máximo 24 horas para permanencia de las personas que, además, deberían ser caracterizadas antes de entrar al territorio”.
Advirtió además que cualquier apoyo que se dé a los inmigrantes “no puede ser una señal de que hay alimentación continua, porque no van a querer irse”.
En relación con aquellos que decidieron quedarse, y que según el más reciente censo de la alcaldía rondan las 1.200 personas, Marthey declaró que solo los organismos internacionales tienen la última palabra en relación con su protección y manutención.
Adicionalmente, cuestionó las condiciones de control migratorio actuales, “porque nos limitamos a contar las personas como contar bultos, pero no hay una base de datos cierta que nos diga quiénes entraron”.