Aproximadamente 70 familias venezolanas se encuentran instaladas en una zona verde adyacente a la Terminal de Transporte de Cali, Colombia. Diariamente, llegan nuevas personas a este lugar donde las condiciones de vida son críticas.

«Yo llevo cinco días (en el campamento), vengo con mi familia… No hemos podido dormir ni nada por estar tapando a nuestros hijos para que no se mojen (debido a las lluvias recientes)”, expresó uno de los migrantes.

Otro, al ser consultado de por qué salir de su país para vivir casi en la indigencia respondió: «aunque usted no lo crea es mejor acá. Aquí por lo menos tenemos la esperanza de que pase alguien y nos regale $2000 con eso arreglamos la comida, pero allá no hay esperanza de nada».

Estas personas se encuentran expuestas a diferentes riesgos al residir en la intemperie. Enfermedades virales, intoxicaciones, desnutrición, entre otros.

A pesar de las campañas de diferentes organizaciones, no hay una solución pronta para esta condición.

En los últimos días, el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, junto con diferentes organismos municipales, realizó una jornada de sensibilización para conocer las necesidades de esta población, pero, al día de hoy, no se ha obtenido resultado alguno, reseña el medio Caracol.

A octubre de 2019, 1.630.903 venezolanos habían llegado a Colombia huyendo de la crisis económica y política que agobia a Venezuela, de los cuales 719.189 permanecen de forma irregular, de acuerdo con cifras de Migración Colombia.

Vía El País de Cali