BERLÍN (AFP) – Un paquete sospechoso fue hallado en un mercado navideño de la ciudad alemana de Potsdam, cerca de Berlín, anunciaron este viernes las autoridades, casi un año después del ataque yihadista más letal perpetrado en Alemania.

Aunque la policía había informado en un primer momento que se trataba de un artefacto explosivo, poco después el ministro del Interior del estado regional de Brandenburgo, Karl-Heinz Schröter, afirmó que “no está claro que sea un explosivo”, en declaraciones a la cadena de televisión n-TV.

“Todavía tiene que ser analizado” y “estamos al inicio” de las investigaciones, insistió el ministro, mientras que los expertos de la policía neutralizaron el paquete sospechoso.

La policía aseguró a continuación que no se encontró ningún detonador. En un tuit, precisó que el paquete sospechoso era un “objeto cilíndrico con cables, baterías y clavos”.

Según Schröter había “seguramente pólvora” en este objeto.

De acuerdo con la policía, un hombre entregó un paquete en el que había una caja de metal a una farmacia delante del mercado navideño.

Un empleado del establecimiento alertó a la policía, que ordenó evacuar una parte del centro de esta ciudad del este de Alemania, situada al suroeste de la capital alemana.

Evacuación

El paquete sospechoso fue descubierto hacia las 14H30 local (13H30 GMT), según otro portavoz de la policía, citado por la radio local RBB24.

Otros agentes desplegados en el lugar se encargaban de que los vecinos de los inmuebles cercanos no salieran de su domicilio, según el diario de la localidad.

Una parte del mercado navideño fue evacuado pero en la otra, el público continuaba su paseo entre los puestos de venta de comida y bebidas. En el momento del hallazgo del paquete este mercado se encontraba muy concurrido, precisó a n-TV Peter Klemm, organizador de la feria.

El mercado navideño se instala todos los meses de diciembre cada año en el centro de esta turística ciudad, conocida sobre todo por su palacio de Sanssouci.

En diciembre de 2016, el mercado de Navidad de Berlín fue el escenario de un ataque con un camión que dejó 12 muertos y más de 70 heridos, y fue reivindicado por la organización yihadista Estado Islámico (EI). Este atentado es el más mortal perpetrado en Alemania.

Desde hace dos años, el país ha sido blanco de varios ataques reivindicados por el EI.

El ministro del Interior, Thomas de Maizière, reafirmó el jueves que Alemania mantenía el estado de emergencia y seguía estando en el punto de mira de los islamistas.

La temporada de mercados navideños, muy apreciados por los alemanes, comenzó esta semana en el país. El del centro de Berlín, donde se produjo el ataque el año pasado, fue puesto bajo unas fuertes medidas de seguridad.

 

Compilación: María Teresa Amaya/coordinadora de noticias internacionales/ Diario La Nación