Internacional
Tercera noche a la intemperie para miles de migrantes de Lesbos
11 de septiembre de 2020
Las autoridades griegas comenzaron el viernes a instalar cientos de tiendas en un recinto cerca del puerto de la isla de Lesbos, donde transferirá a miles de solicitantes de asilo que se quedaron sin techo tras el incendio que destruyó el campo de refugiados de Moria, el más grande de Europa.
Helicópteros del ejército griego trasladaron tiendas cerca de un antiguo campo de tiro rodeado de una valla, a tres kilómetros del puerto de Mitilene, constató la AFP en el lugar.
A lo largo de la carretera que va de Moria al puerto de Mitilene, familias de migrantes seguían acampadas en el arcén, algunas sin tiendas de campaña, por tercera noche consecutiva.
El viernes por la mañana, once vehículos de la policía y dos cañones de agua llegaron al puerto de Mitilene, la capital de la isla. Dos furgonetas de la policía bloquearon la carretera cerca del puerto para impedir el acceso a los demandantes de asilo. Al menos nueve batallones de policía llegaron a Lesbos desde el martes, según una fuente policial.
Unos mil solicitantes de asilo sin refugio, según la policía y 2.000 según los medios en el lugar, se manifestaron el viernes por la tarde para reclamar que les dejen salir de la isla.
“Libertad”, gritaban los manifestantes a lo largo de la carretera, mientras que otros sostenían pancartas en las que se leía “Necesitamos paz” o “Moria se cobra vidas”.
Los incendios del martes y el miércoles por la noche, que destruyeron el campo superpoblado y sórdido de Moria, apodado “la jungla”, dejaron a casi 12.700 personas sin refugio, incluidos 4.000 niños.
En su lucha por ayudar a los miles de personas sin hogar, el gobierno pidió a las autoridades locales de Lesbos una “solución rápida” para albergar a los sin techo.
Pero el jueves, cerca de las restos del campo, la población local bloqueó las carreteras para tratar de impedir la instalación de nuevas tiendas.
“Ahora o nunca tenemos la oportunidad de cerrar Moria para siempre. No queremos otro campamento y nos vamos a oponer a todas las obras que se están haciendo”, dijo Vaguélis Violatzis, presidente de la localidad de Panagiouda.
Movilización europea
El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, prometió construir un nuevo centro en la isla, pero urgió a la Unión Europea a tener un papel más activo en su gestión.
“Se necesitará un nuevo centro [pero] el modelo de gestión debe ser diferente”, declaró Mitsotakis tras una reunión en Atenas con el vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas.
“Discutiremos la máxima participación europea en este esfuerzo”, añadió.
La canciller alemana, Angela Merkel, anunció el lanzamiento de una iniciativa franco-alemana para permitir la acogida en la UE de los menores que se encontraban en Moria.
En ese sentido, diez países del bloque indicaron que recibirían a unos 400 migrantes menores, según afirmó el viernes el ministro del Interior alemán Horst Seehofer, que precisó que Alemania y Francia acogerán cada uno entre 100 y 150 niños.
Los Países Bajos recibirá a unos cien migrantes, la mitad de ellos menores, y Finlandia acogerá a once niños.
El vicepresidente de la Comisión, que visitó Lesbos el jueves, dijo que en las próximas horas habrá buques financiados por la UE para alojar a los solicitantes de asilo más vulnerables.
El gobierno de derecha griego, que lleva un año en el poder, endureció la política migratoria y prometió la construcción de nuevos centros de registro cerrados en Lesbos y en las otras cuatro islas del Egeo donde viven en total más de 24.000 personas, cuatro veces más de su capacidad inicial.
Una reciente ley aprobada por el Parlamento tiene por objeto limitar el número de oenegés que ayudan a los refugiados en los campamentos de todo el país para que el gobierno pueda tener más control sobre la situación.
El jueves, algunas oenegés de derechos de los refugiados dijeron a la AFP que tuvieron que distribuir discretamente alimentos entre los refugiados por temor a que las fuerzas de seguridad no los dejaran.
La Protección Civil griega declaró el estado de emergencia durante cuatro meses en Lesbos, que tiene una población de 85.000 habitantes y es la principal puerta de entrada de los migrantes a Grecia por su proximidad a Turquía.
AFP