En Isnotú celebran el tercer aniversario de la beatificación de José Gregorio Hernández
30 de abril de 2024
Eduardo Marapacuto
Tras conocerse los resultados presentados por la Comisión Nacional de Primarias (CNP), el Hombre que Calculaba convocó a una reunión de emergencia y extraordinaria a los siete grandes geómetras para que lo ayudaran a descifrar los resultados finales que presentaba esa Comisión. Entre los Convocados por el Hombre que calculaba, estaban presentes: Descartes, Pascal, Newton, Leibniz, Euler, Lagrage y Comte.
Uno a uno fueron llegando, pasaron directo a la sala de reuniones, donde se iniciaron los intensos debates, desde todas las visiones y con posturas y argumentos científicos, donde las fórmulas matemáticas no admitían ese resultado. El Consenso fue unánime y consideraron esos resultados como la aberración de todas las aberraciones. En tanto Malba Tahan, el Hombre que Calculaba, caminaba de aquí y de allá, enviando mensajes de whatsaap a su amigo Albert Einstein y audios a todos sus panas matemáticos, entre ellos Euclides, Pitágoras, Sophie Germain, Hipatia, Tales de Mileto y Arquimedes.
A pesar de la primera consideración, el debate se profundizó a solicitud de Descartes, quien pidió que se tomaran en cuenta los números naturales, enteros, racionales, irracionales. Complejos o imaginarios, cardinales, ordinarios, decimales, primos y compuestos, incluso los números romanos; con sus respectivas operaciones de sumas, restas y multiplicaciones; desatándose un debate candente, el cual se complicó cuando se incluyeron limites, derivadas integrales para explicar la complejidad de esos números y resultados imaginarios. También se consideraron en el debate variables como las medidas, las funciones, los movimientos y las fuerzas de la aberración.
De verdad, la sayona y la cohorte de los espíritus malvados creen que asustan, que meten miedo. Al contrario, aquí hay un pueblo revolucionario que busca fecundar el porvenir y con ello asegurar los valores más preciados de la dignidad del ser humano, para que todos nos alimentemos de las esperanzas y no de las mortajas de la sepultura; para que nos alimentemos de los pensamientos enaltecedores de la verdad y no de los recuerdos vacíos. Así que agua bendita con esos seres del inframundo, y en cada zancada se debe ir marcando la ruta y caminando seguros bajo el sol de la realidad ardiente, esa que quema pero que también te da las energías para continuar la marcha hasta allá, hasta el horizonte de las horas, con sus luces y su brillo. Que nos hable la voz de la verdad y nos guíe siempre en el sentimiento de la solidaridad; que después de estos 24 años de recorrido de la revolución bolivariana, nos encontremos con la primavera; que nos encontremos con la esencia de nosotros mismos, con nuestra tierra, con nuestra amada Patria y dejemos que ellos, los seguidores de la sayona sigan buscando la oscuridad en medio de las tinieblas.
A pesar de todos los obstáculos que nos quiera imponer el imperio y los espíritus del inframundo, no detengamos la marcha. Con los ojos de la fe y de la certidumbre, no perdamos el brillo de la existencia. Nada de mirar por rendijas oscuras y querer pisar terrenos de falsos linderos, porque esos pudieran ser los caminos de las tierras baldías, de los pantanos peligrosos y los bosques de los árboles talados. Nuestro andar debe estar marcado por el deseo de vivir y soñar, de luchar por los ideales de nuestra Patria donde hemos nacido, de esa Patria que también sueña con la grandeza; porque -aunque usted no lo crea- la Patria también respira y sueña con la grandeza. Luchar todos los días por la verdad revolucionaria es mantener viva la esperanza de la pasión y la firmeza; es sembrar la semilla bajo el sol inclemente, pero con el convencimiento que germinará y fecundará la soberanía plena. Ese es el compromiso patrio que tenemos. ¡Qué así sea!
Politólogo, MSc. en Ciencias Políticas.
Investigador RISDI-Táchira
Rafael Orellana contratado para torear en Tovar
30 de abril de 2024
IDT visitó el «Alba Jáuregui» de Gimnasia
30 de abril de 2024
Lo más visto
