Nacional
Venezuela, asfixiada por la deuda, obtiene un pequeño respiro de Rusia
16 de noviembre de 2017
(AFP)Venezuela firmó este miércoles un acuerdo para reestructurar unos 3.000 millones de dólares de la deuda con su aliado Rusia, un alivio que no sacará del atolladero a este país estrangulado y bajo default parcial.
Asfixiada por la caída del precio del petróleo y las sanciones estadounidenses, Venezuela asegura ser «buen pagador», pero las malas noticias se suceden en un país cuya población está sometida a la escasez de alimentos y medicinas, a falta de dinero para importarlos.
Una delegación venezolana dirigida por el ministro de Economía y Finanzas, Simón Zerpa, firmó el acuerdo que reestructura un crédito otorgado en 2011 para comprar armamento ruso.
El acuerdo prevé un nuevo calendario de reembolsos en 10 años con aportes «mínimos» durante los primeros seis años, indicó el ministerio ruso de Finanzas.
«Aliviar la carga de la deuda» permitirá «utilizar los fondos liberados para desarrollar la economía del país, mejorar la solvencia del deudor y aumentar las posibilidades para que todos los acreedores recuperen los créditos ya acordados», según un comunicado del ministerio ruso.
El vicepresidente de Economía de Venezuela, Wilmar Castro, se congratuló durante una conferencia de prensa en Moscú por el acuerdo porque tiene «términos muy favorables» que Venezuela –según dijo- puede cumplir.
«Esa flexibilización en el pago de la deuda con Rusia (…) nos permitirá satisfacer un conjunto de necesidades del pueblo venezolano y retomar el intercambio comercial», afirmó Castro, en un video difundido en Caracas por el gobierno.
“Una gota de agua”
Más allá del acuerdo, el gobierno ruso “no ha recibido ninguna petición” de ayuda adicional de parte de Venezuela, según el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
Anton Tabakh, economista jefe de la agencia de calificación RAEX, explicó a AFP que la operación permite “a ambas partes mantener las apariencias y ganar tiempo, ya que ahora la cuestión de la deuda venezolana no puede ser resuelta de ninguna manera”.
La reestructuración de esa deuda es una gota de agua en el endeudamiento de Venezuela, que se estima en 150.000 millones de dólares.
“Es un alivio, pero es un alivio pequeño. No cambia las circunstancias. No ayuda ni a estabilizar la economía ni a aumentar su capacidad de pagos substancialmente», aseguró en Caracas a la AFP el economista venezolano Orlando Ochoa.