Nacional

Yelitza Alviarez:  Una vida dedicada a armonizar el camino de las venezolanas

13 de julio de 2023

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Es alegre, conversadora y luce con orgullo sus 70 años, la mujer no se imagina haciendo algo diferente que no sea acompañar a las venezolanas en el camino de consolidar sus sueños

Por Rosalinda Hernández C.

Diseño por Paloma Lacruz


Trascender y dejar huella en todo lo que beneficie a las mujeres es lo que se propone Yelitza Alviarez. “Mientras me dure la gasolina seguiré trabajando por las mujeres venezolanas”, asegura sin tapujos la socióloga y profesora jubilada del Centro de Estudios Ambientales de la Universidad Central de Venezuela (UCV), y Coach Ontológico Acreditado (COA) de la Federación Internacional de Coaching Ontológico Profesional (FICOP).

Reafirma que mientras cuente con su “cabecita”, la salud, una buena gerencia del tiempo y el entusiasmo, podrá continuar haciendo la labor que desarrolla, tanto en la Asociación de Mujeres Emprendedoras de Venezuela (AMEV), como en su propio grupo: “Tejiendo mi Cuento”, ambas organizaciones orientadas a acompañar a las venezolanas para que alcancen sus sueños.

“A nosotros nos gustaría llegar al mayor número de mujeres posibles para que aprendan; queremos poder acompañarlas y que adquieran herramientas, tanto para su quehacer como emprendedoras, como para su vida como mujeres que hacen familiar, con pareja o no, con acciones comunitarias hasta donde nos sea posible y dejar huellas”.

Cuando se le pregunta a Yelitza qué la ha llevado a dedicar su tiempo al trabajo con las mujeres, explica que viene de una familia mayoritariamente conformada por mujeres, en la cual la sororidad estuvo muy presente.

Y así ha continuado en su pequeño núcleo familiar. Sus hijas la describen como una mujer que “pone alma a todo lo que hace y, a pesar de tener 70 años, tiene un montón de cosas por ver, hacer y descubrir. Siempre intenta lo que se propone y no se queda con el ¿qué hubiera pasado sí?, además posee un equilibrio perfecto entre su lado femenino y masculino”.

Un motivo masculino

“Todo empezó en mi hogar; mi papá era un hombre con un femenino muy desarrollado, muy dulce, muy amoroso, muy buen negociador. Creo que esa es la primera razón que me motivó a trabajar con mujeres”.

Recuerda que hace 23 años inició su camino de acompañamiento y trabajo con mujeres en un círculo de lectura donde el primer libro que leyeron fue “Mujeres que Danzan”. Después vinieron otros títulos, también iban al cine juntas, comentaban las películas y esto facilitó crear círculos de mujeres con la inquietud sobre lo femenino y sobre cómo es que hombres y mujeres viven esto. De allí sale la propuesta de diseñar un taller sobre los cuentos y cómo podemos tejerlos con nuestra propia vida. Empezaron con Barba Azul, uno de los que ha tenido más demanda y más éxito incluso en espacios organizacionales y empresariales.

“Las mujeres tenemos una mejor disposición a la construcción de intimidad y de escucha, entonces nos buscamos para eso”, afirma Yelitza.

Apareció AMEV

La Asociación Mujeres Emprendedoras de Venezuela, AMEV, “son mujeres emprendedoras que lo que están es echándole un camión para poder sacar sus familias adelante y para poder armonizar sus diferentes roles”, señaló.

AMEV atiende a mujeres amas de casa, estudiantes, profesionales, incluso se han atendido mujeres fuera de Venezuela, migrantes que desde los países receptores tienen el deseo de aprender, obtener herramientas o mejorar lo que ya poseen y la organización ha sido su guía.

“Para mí es una extraordinaria oportunidad de poder conectar, insisto en mi verbo, en poder tejer. Entonces fue muy interesante poder hacer este puente entre mis dos líneas de trabajo. La línea de los talleres, los círculos de lectura y el acompañamiento individual y la segunda más dentro de la organización de Mujeres Emprendedoras de Venezuela”.

AMEV acompaña a las mujeres en el camino donde ellas se constituyen, se descubren, se arman -no en el sentido de la guerra- en la adquisición de competencias para su hacer como emprendedoras y esto lo hacen desde su ser mujer ¿Qué significa esto desde lo sociológico? “Significa que ayudamos al fortalecimiento de las mujeres, ayudamos a afinar y a fortalecer el discernimiento como una competencia para identificar en sus vidas los diferentes roles que desempeñan y cómo esto -además- tiene una incidencia directa en ellas y en su familia.

“Nos enfocamos en qué hacer cuando toca ser mamá y decido ser emprendedora, cuáles son mis prioridades, cómo establezco metas, cómo diseño mi negocio, cómo participo y cómo diseño mi familia. Un resultado o un principio de todo esto es tener la posibilidad de conocerse, de mirar hacia adentro”.

Tanto en el proyecto “Tejiendo mi Cuento” como en AMEV, se contribuye al viaje hacia el interior, al conocimiento personal. Las mujeres se auto descubren como hacedoras y se fortalecen las competencias como contribución al desarrollo y refuerzo del discernimiento como competencia para la vida.

En cifras

A través de AMEV, se han capacitado 3.500 mujeres venezolanas, no solo en los programas semilleros que lleva siete ediciones, también en otras actividades. Solo este último, se ha logrado llegar a 210 mujeres, el 80% de ellas amas de casa.

Se está organizando un semillero Latam pensado para madres emprendedoras migrantes venezolanas en Argentina, Chile y Uruguay, por los momentos. En agosto de 2023 será la primera edición para madres emprendedoras hispanas en Canadá, y el mismo mes será llevado a cabo Sembrando Emprendedoras Teens.

Este último programa va dirigido a niñas y adolescentes venezolanos en Argentina, Chile y Uruguay. La iniciativa arriba a la quinta cohorte, formando emprendedores niñas y adolescentes venezolanas esta vez en Venezuela, Argentina, Chile y Uruguay.

“Tejiendo mi Cuento”, que finalmente se retomó presencialmente, pues durante dos años había sido suspendido por la pandemia, será un taller de cuentos y tendrá como protagonista a la historia Barba Azul, esta vez dirigido a hombres.

“Quiero ahondar en ver cómo ellos, siendo compañeros de vida, trabajo y demás, están concibiendo el rol de las mujeres y la feminidad. Un tema rico en experiencias y que seguramente nos llevará a explorar más en la temática”.

*Esta historia pertenece a la Red de Mujeres Constructoras de Paz en alianza con Diario La Nación

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