NOS ENCONTRÁBAMOS a principios de diciembre de 1992 en la ciudad de Lima para entrevistar al general Francisco Visconti refugiado en Perú tras el intento de golpe de estado contra Carlos Andrés Pérez, cuando la noticia que aún era la conmoción en el sureño país, era el arresto del máximo líder de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, conocido como  el “camarada Gonzalo” y calificado como el más grande genocida producido en América Latina…..HABÍA SIDO DETENIDO por el Grupo Especial de Inteligencia GEIN que pertenecía a la DIRCOTE que jefaturaba Vladimiro Montesinos…ABIMAEL GUZMÁN, FALLECIÓ  el pasado sábado 11 de septiembre tras haber estado tras las rejas por 29 años, cumpliendo una sentencia de prisión perpetua en la cárcel de máxima seguridad de la Base Naval del Callao. Tenía 86 años este dirigente maoísta que tanto dolor causó a las familias peruanas que ha contabilizado por lo menos más de sesenta mil asesinatos durante el tiempo que jefaturó ese mortal movimiento desde que lo fundó en 1970 y declaró la guerra al gobierno de Alberto Fujimori en 1980 que finalmente lo venció con su arresto en una academia de danzas que funcionaba en el distrito de Surquillo a cargo de una bailarina clásica, Maritza Garrido Lecca, de la alta sociedad limeña quien estuvo presa por 25 años…..EL NEFASTO LÍDER a quien le agradaba que le dijeran el “presidente Gonzalo” murió por neumonía y había creado un grupo de seguidores desde que se graduara en Filosofía en la Universidad San Agustín y ejerciera la cátedra en la Universidad San Cristóbal de Huamanga en el andino departamento de Ayacucho, hasta decidirse montar su grupo armado y arremeter contra el sistema democrático que culminó con su apresamiento años después de haber sembrado de dolor y sangre a buena parte de esa sureña nación……HABÍA NACIDO en una pequeña población porteña del departamento de Arequipa, Mollendo, de la provincia de Islay para luego seguir estudios en el Callao y Arequipa, donde se formó a través del partido comunista y de donde surgió el Sendero Luminoso para tratar de llegar por la fuerza a los máximos niveles del poder….A RAIZ  de su muerte, el presidente actual de Perú, Pedro Castillo,  y a través de sus ministros, prohibió cualquier manifestación en favor del guerrillero señalando que cualquier homenaje sería considerado  como apología del terrorismo y condenado a una pena de hasta 15 años de cárcel….EN UN PRINCIPIO se habló de incinerar el cuerpo del malogrado terrorista, pero al parecer habría sido reclamado por un familiar para ser enterrado en algún lugar desconocido hasta la fecha. Con la desaparición de Abimael Guzmán, se cierra un capítulo de diabólica forma de hacer política en el continente.

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Y ESTO, es todo por hoy.

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MENTIRAS  universales:

“Abimael buscaba la justicia en Perú”.

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DIOS, los bendiga, ¿Saben?

VICTOR MATOS.