Opinión

Día de la Alimentación

16 de octubre de 2018

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Invertir en la agricultura para lograr la seguridad alimentaria (FAO 2006).

Aproximadamente dos milenios y medio a.C., se conoció la correlación entre la alimentación y la salud. Tanto los humanos como los demás seres vivos necesitan aparte del agua disfrutar de una variada, equilibrada y cantidad de alimentación para la subsistencia. Desde entonces los especialistas en alimentación han considerado que la base fundamental de una buena nutrición está respaldada por el equilibrio, la variedad y la moderación de nuestros alimentos. En esa época, uno de los más famosos médicos Hipócrates (460 a.E.C.), dijo: “nuestra alimentación era nuestra medicina”. En los tiempos modernos se ha demostrado la relación existente entre las carencias alimentarias y las diferentes enfermedades graves producidas por la falta de una sana comida, lo cual hoy día se traducen en serios problemas para la salud.

En los últimos tiempos el desarrollo de la tecnología de la agricultura ha producido problemas a la población en cuanto a la escasez, precio de los productos y a su calidad. Los organismos internacionales y nacionales promotores de un desarrollo sostenible, que no deteriore el medio ambiente, tratan en lo posible que ese crecimiento llegue al colectivo o que el reparto de la riqueza sea equitativa. Para alcanzar logros satisfactorios es necesario organizar la estructura de los recursos, diseñar y ejecutar una logística de industrialización, distribución de los productos y practicar una adecuación del medio ambiente a las necesidades de la alimentación de las personas. Así, se evitaría en lo posible llegar a los extremos de la hambruna.

Según la teoría de Tomás Alberto Malthus (1766-1834), economista inglés, sostuvo que “la población crece geométricamente o exponencialmente y los alimentos aritméticamente o linealmente”. En concordancia a esto el fomento del conflicto social tiene su mayor repercusión en la escasez alimentaria. Para evitar tales amenazas debe haber un mercado de producción abundante, barato y en condiciones normales de calidades y variedades. Para tener una alimentación sana deben practicarse las recomendaciones saludables en la materia, para satisfacer las necesidades específicas en las diversas etapas de la vida. Así promueve en los niños el crecimiento y un desarrollo apropiado, asimismo en los adultos proporciona tener el peso adecuado para la talla y además advierte el desarrollo de múltiples enfermedades.

Para crear conciencia en los pueblos relacionada con la problemática alimentaria mundial y fortalecer la solidaridad en la lucha contra el hambre, la desnutrición y la pobreza, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), proclamó en 1979, el 16 de octubre como el Día de la Alimentación en honor a la fundación de ese organismo en 1945. En respaldo a esa iniciativa de la FAO, el 5 de diciembre de 1990, la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 35/70 aprobó esa fecha como el Día de la Alimentación. Entre los objetivos de la FAO para celebrar esta efeméride estableció: “estimular una mayor atención a la producción agrícola…, estimular la cooperación económica y técnica entre países en desarrollo, promover la participación de las poblaciones rurales, aumentar la conciencia pública de la naturaleza del problema del hambre en el mundo, promover la transferencia de tecnología al mundo en desarrollo y fomentar todavía más el sentido de solidaridad nacional e internacional en la lucha contra el hambre, la malnutrición, la pobreza, señalar a la atención los éxitos conseguidos en materia de desarrollo alimentario y agrícola”.

Al conmemorarse el 16 de octubre el Día de la Alimentación, aunamos esfuerzos para alcanzar la Seguridad Alimentaria a través de la disponibilidad de alimentos, el acceso de las personas a los mismos y el aprovechamiento biológico de los comestibles. De esa forma, los hogares tendrán buenas condiciones de vida si sus miembros disponen y consumen alimentos en cantidad y calidad de acuerdo a las necesidades biológicas. En 1975 la FAO definió a la seguridad alimentaria como “la capacidad en todo momento de aprovisionar a todo el mundo con productos básicos, de modo que se puede sostener un crecimiento del consumo alimentario, soportando las fluctuaciones y los precios”. Tal acepción de la seguridad alimentaria es la antítesis de la soberanía alimentaria del desgobierno de Nicolás Maduro que tiene a los venezolanos en situación de hambre por sus destartaladas políticas…( Alejo García S) /.

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