Precio del dólar este lunes en la frontera
6 de mayo de 2024
Muy pocas veces he mencionado los nombres del fallecido presidente Hugo Chávez y el de Nicolás Maduro. Porque como ciudadano venezolano estoy padeciendo la severa crisis que vivimos desde que el primero estuvo en Miraflores. Bajo engaño se “encaramó” en el poder. Allí están las evidencias. Decenas de entrevistas son testimonio de cuando transitaba como candidato a la más alta magistratura por allá en el año 1998. Todos, sin distingo, caímos por inocentes. Hombre hábil en las acciones. Uno de los testimonios más significativos (a mi juicio) fue una entrevista que le hiciera Jaime Bayly (1998): “…yo no soy socialista…yo creo en un proyecto humanista…”. Igualmente, al periodista Jorge Ramos (1998), entrevista que se conoce en las redes sociales como “Las tres mentiras de Chávez”.
Es pertinente recordar que el militar golpista hizo público un segundo documento el cual denominó “Una Revolución Democrática: La Propuesta de Hugo Chávez para transformar a Venezuela”. En ese documento presentaba cinco puntos: 1) Equilibrio político, 2) Equilibrio social, 3) Equilibrio económico, 4) Equilibrio territorial y 5) Equilibrio mundial. (Diario Las Américas, 28/02/2015). Cabe entonces la pregunta: ¿esos “equilibrios” se han logrado? Muy por el contrario, vean la Venezuela que tenemos.
En cuanto al actual mandatario, su llegada a Miraflores fue un camino lleno de espinas. El triunfo dado por el CNE (1 %) sobre Henrique Capriles (2013), sembró dudas y cuestionamientos en la población venezolana y en el mundo. Luego vinieron la designación de los miembros del actual TSJ, el no reconocimiento de la AN, la militarización de muchas instituciones gubernamentales donde un gran número de altos oficiales ejercen cargos administrativos propios de civiles; no aceptaron la aplicación del referendo revocatorio (derecho constitucional); una asamblea nacional constituyente elegida sin consultar a toda la población venezolana; el nombramiento de un Fiscal General de la República Encargado (figura que no existe en nuestra Constitución, aún vigente); el acabose de la producción económica en todos los sectores de nuestra sociedad, y el etcétera de decisiones en contra del desarrollo nacional se pierde de vista. Ahora mismo adelantan unas elecciones…¿para continuar con la devastación de la República? No hay voluntad de mejora. Por el contrario, encarcelan, inhabilitan y persiguen a dirigentes políticos. La lista es numerosa.
En estos momentos, cuando se inicia la peregrinación hacia lo que pudiera ser la puntilla final para, o perpetuarse en el poder y continuar el viacrucis mortal de la República, o terminar siendo víctimas de las naciones que desean ayudar a Venezuela en su recuperación y desarrollo económico sostenido y que un grupo de hombres y mujeres no dejan que esto ocurra. Estos fijan su atención en un modelo de gobierno que es considerado obsoleto en el planeta Tierra. El responsable de esta maleza de patología política, social y económica que llevamos a cuesta, fue la hegemonía adeco-copeyana de la época. No cabe la menor duda. Un gran porcentaje de la población quería salir del marasmo político de la llamada “IV República”. Y la gota que derramó la jarra con agua en aquella oportunidad fue la imagen y el “por ahora” del difunto presidente cuando se rindió y fue capturado al tratar de derrocar al presidente Carlos Andrés Pérez. Y he aquí mi tesis: tal vez el régimen actual no quería que el Sr. Óscar Pérez se convirtiera en otro “por ahora” y fue aniquilado en la llamada “Masacre de El Junquito” (2018). Pienso que Maduro está metido hasta los tuétanos, en el ojo de la tormenta. Quiera Dios que todo termine en santa paz. Se abre el debate pues.
(Alfredo Monsalve López) /
[email protected]
@hotmail.com
¡Terribles inundaciones en Brasil!
6 de mayo de 2024
Lo más visto
