Apenas comienzo a redactar este articulo, los ladridos de mi perro, Salisburry, me advierten que la oposición es ambas cosas; es decir, ignorante y manipuladora, porque siempre terminan por creerse sus propias mentiras con las cuales manipulan la conciencia de todos sus seguidores y de uno que otro incauto que por allí sucumbe ante el veneno mortífero lanzado desde las fauces putrefactas de la MUD. Así, arrastrándose en el pantano de sus propias ideas perversas, han inventado cualquier cantidad de cosas, las cuales han hecho mucho daño, con terribles consecuencias colaterales para la sociedad venezolana y la salud democrática del país.
Durante casi cuarenta años gobernaron en base a la manipulación y el engaño, la corrupción, la podredumbre y la descomposición, donde los gobiernos adecos y copeyanos se alternaban para actuar como los verdaderos carroñeros del erario público y para justificar sus prácticas corruptas, los adecos, por ejemplo, se inventaron el eslogan que “con los adecos se vive mejor, porque roban y dejan robar”. Si se revisa esa historia reciente, encontraremos que el prontuario del puntofijismo es extenso, por ejemplo, el caso del presidente del “Sierra Nevada”, que al final fue destituido y enjaulado por ladrón. De ese mismo partido, encontramos al presidente bobo, que dijo: “la banca me engañó”. Si seguimos revisando páginas y páginas, encontramos los casos de la “parlamatraca”, los “jeeps de Ciliberto”, los cheques que mensualmente llevaba la barragana a la sacrosanta Conferencia. De verdad, es toda una historia de poder, corrupción, engaños, mentiras y manipulación.
A Venezuela la vendieron como la mejor democracia del mundo y hasta un tal Rómulo lo mentaban como el padre de la democracia. Así, con esas falsas premisas nació el sistema político puntofijista y en el marco del jardín florido, creció la guanábana podrida, que destiló jugos de corrupción, chantaje y manipulación durante casi cuarenta años. Esa es la verdad y hay que contarla, para no volver otra vez al reino delirante del puntofijismo. Precisamente, en estos tiempos de elecciones regionales, quieren colar por allí a una adeca, que representa todos esos ideales y prontuario de corrupción, engaño, manipulación e ignorancia.
Con esas intenciones manifiestas de querer manipular, comenzaron diciendo que nuestro gran y eterno líder, Hugo Chávez, era un dictador, un Hitler, un Mussolini. No pudieron parar el liderazgo del Comandante, quien los venció limpiamente en todas las elecciones realizadas durante su vida y su mandato. En su esquema de ignorancia opositora y manipulación ilustrada, dijeron que el gobierno revolucionario les iba a quitar los hijos menores a sus padres, que si todo el mundo tenía que vestirse de rojo. Es decir, una sarta de mentiras, propias de un chigüire bipolar.
En cuanto a elecciones y seguidores, han mentido colosalmente. Para el referéndum del 2004 dijeron que habían recogido 30 millones de firmas. Hace poco, en un tal plebiscito dijeron haber votado más de 7 millones de escuálidos, para finalmente, terminar en 300 mil votantes en las elecciones primarias, donde a dientes y muelazos escogieron a sus candidatos. No lo olvides, la oposición es ignorante y manipuladora, y en el caso del Táchira, la tal candidata de la oposición representa esos ideales malignos del puntofijismo. Así que no te equivoques: ¡Vota por Vielma, vota por ti, vota por el Táchira!
Politólogo
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Eduardo Marapacuto (*)