Política

La baja participación se notó en los centros

22 de noviembre de 2021

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Candidatos opositores, como Gustavo Delgado, William Méndez (alcaldía de San Cristóbal), Juan Carlos Palencia (alcaldía de Cárdenas) y Fernando Andrade (gobernación), realizaron algunas denuncias respecto al proceso electoral, acusaciones que iban desde el ventajismo, hasta el amedrentamiento, supuestamente

Por Favio Hernández

Este domingo se celebraron las elecciones de gobernadores, alcaldes, diputados regionales y concejales, en todo el país.

Los tachirenses acudieron a las urnas electorales con la finalidad de hacer uso de su derecho al voto, el cual está contemplado en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, para elegir a un gobernador, 29 alcaldes, 13 diputados al parlamento regional y 193 concejales en los municipios.

Para la jornada estuvieron disponibles 669 centros electorales, los cuales tenían la misión de albergar a los 892.940 electores que conforman el padrón electoral del Táchira.
En la entidad salieron a la luz nueve candidatos al Ejecutivo regional, 199 para el Consejo Legislativo del estado Táchira (CLET), 299 para las alcaldías y 2.635 para los concejos municipales.

Mucha abstención

Aún sin conocer a ciencia cierta el porcentaje de participación que registró esta cita electoral, se pudo apreciar poca afluencia de electores a los diferentes núcleos de votación.

A primera hora de la mañana, en la Escuela Básica Bustamante, cuando votó el candidato a la gobernación por parte del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Freddy Bernal, se pudo visualizar alrededor de 200 personas a las afueras de este centro de votación, cola que fue disolviéndose poco a poco, con el pasar de los electores.

No obstante, y aunque la mayoría de los candidatos hablaron de una aparente nutrida participación electoral, la realidad fue otra y el colectivo en general manejaba la versión de poca presencia en las urnas.

La abstención jugó a conveniencia de los diferentes bandos: unos decían que favorecía a Bernal y su maqueta, mientras que otros alegaban que la oposición tenía ventaja con este suceso.

Constantes recorridos por los diferentes centros de votación de la zona metropolitana del estado demostraban la escasa participación de las personas, aunque se reportaba que en los municipios de la periferia metropolitana fue un poco mayor el nivel de elección.

Denuncias

Candidatos opositores, como Gustavo Delgado, William Méndez (alcaldía de San Cristóbal), Juan Carlos Palencia (alcaldía de Cárdenas) y Fernando Andrade (gobernación), realizaron algunas denuncias sobre el proceso electoral, acusaciones que iban desde el ventajismo hasta el amedrentamiento, supuestamente.

Delgado se quejó sobre la existencia de los puntos rojos en las cercanías de los centros electorales, aseverando que estos no estaban permitidos y que, según acuerdos preestablecidos, se había concretado que no iban a funcionar.

Por su parte, Méndez denunció algunas aparentes irregularidades con respecto a las selecciones en la pantalla electoral, manifestando que salía una opción diferente a la seleccionada.

Palencia criticó el voto asistido en el municipio Cárdenas, sosteniendo que a las mesas ingresaban personas muy jóvenes y que eran asistidas por individuos de más edad que ellas.

Por su parte, la de Andrade fue mucho más contundente, indicando que en la mañana hubo presencia de efectivos la Dgcim en un centro electoral de Michelena, aun cuando se suponía que allí deberían estar apostados los efectivos militares del Plan República.

Del mismo modo, Andrade señaló que en el municipio Lobatera algunos supuestos guerrilleros del ELN intimidaron a los testigos de mesa.

“Operación Remate”

Fieles a su tradición, a lo largo de la época electoral de los últimos 20 años, el principal representante del Gobierno nacional en la región activó la estrategia de votación del 1×10, la cual consiste en que una persona se hace responsable de llevar a otras 10 a sufragar.
Sin duda alguna, esta estrategia le sumó un buen puñado de votos, de manera rápida, a la tendencia oficialista.

Esta opción buscó consolidar algunos municipios en donde, según reportes preliminares y partidistas, nada oficial, se daban por ganados para su tendencia, del mismo modo que tuvo la intención de acortar diferencias en otros.