Para el dirigente opositor de la región, Danny Ramírez, la alcaldía de San Cristóbal es la institución por excelencia llamada a garantizar la modernidad, el desarrollo, el progreso y la prosperidad de nuestro municipio, “gerenciando de manera innovadora, con eficiencia y eficacia en tiempos de crisis, para lo cual se requiere de grandes cualidades, como la preparación, la capacidad, la honestidad, la calidad humana y el espíritu de servicio, de quien asuma el reto de dirigir este ente municipal”.

—Ver marchar a cientos de trabajadores del ayuntamiento capitalino exigiendo el pago de los compromisos laborales pendientes por la actual administración, deja mucho que desear y una gran molestia, sobre todo en los contribuyentes, que hoy se preguntan a dónde fueron a parar los aumentos de impuestos que les aplicaron, con la excusa que los mismos serían usados para mejorar la calidad de vida de los sancristobalenses -dijo-.

Destacó que son innumerables las razones por las cuales nuestra capital del Táchira “pasó de ser la Ciudad de la Cordialidad a la ciudad del caos, la anarquía y la muy mala calidad de vida; es evidente que no escapamos a la destrucción del país, de su aparato productivo, las instituciones y de la miseria causada por la dictadura criminal dirigida desde La Habana, Cuba, pero también se le suman elementos de la incapacidad e irresponsabilidad de sus gobiernos municipales”.

Ramírez recuerda que desde hace un par de décadas “no vemos realizadas ninguna obra de envergadura en San Cristóbal, ni siquiera el estímulo necesario para el desarrollo de la inversión privada ha sido prioridad en quienes han ocupado el cargo de alcalde; solo saltan a la memoria la simple ampliación de unas avenidas y la construcción de un famoso centro comercial, de allí que las gestiones municipales pésimas e improvisadas han venido causando el desastre que hoy evidenciamos en cada una de las calles de nuestra ciudad”.

(Augusto Medina)