El templo de San Agatón, de Palmira, cumplió su décimo tercer domingo sin abrir sus puertas para oficiar una misa a sus feligreses, dando cumplimiento a las medidas preventivas contra el covid 19.

Este domingo, un grupo de personas esperó que sonaran las campanas a las 12:00 del mediodía, para recordar la fiesta de Corpus Christi, fecha sagrada para los católicos que celebran el acto principal de la misa, que es la eucaristía, cuando el vino y la hostia se convierten en la sangre y cuerpo de Cristo.

Un grupo de personas, frente a la iglesia, esperó a que abrieran por unos minutos; no obstante, decidieron marcharse al no escuchar las campanas, que de alguna manera es una de las formas de llamar a los católicos a acudir a la iglesia.

Uno de los sacerdotes del seminario de la orden Agustinos Recoletos, “Nuestra señora del Buen Consejo”, se acercó y a quien preguntó por las actividades de la iglesia, le respondió dándole la bendición.

La gente recordó que hace tres meses el párroco abrió una parte de la puerta principal y, acompañado de una hermana de la orden Agustinas, procedió a bendecir el municipio por los cuatro puntos cardinales.

Es de resaltar que el templo de la parroquia San Agatón se abre todos los jueves, de nueve de la mañana a once y media, para llevar a cabo el ejercicio de la Hora Santa, cumpliendo con todas las normas de prevención contra el coronavirus, acto religioso al que acuden muchos feligreses. (NP)