La crisis eléctrica en el país, a juicio del ingeniero Winston Cabas, presidente de la Asociación Venezolana de Ingeniería Eléctrica, del Colegio de Ingenieros de Venezuela, es realmente severa, hasta el punto de que “vienen más racionamientos, más apagones, porque la capacidad instalada es de 34 mil megavatios y solo se cuenta con 17 mil 500”.
Sostuvo que el ministro Motta Dominguez miente al decir que en 10 días solucionará el problema -que se cumplen el sábado-, porque los daños son estructurales por el abandono oficial al mantenimiento del sistema eléctrico nacional.
Explicó que, por ejemplo, de seis termoeléctricas hay disponibles 3.500 megavatios y la indisponibilidad es de 14 mil megavatios, “por eso en Venezuela, en los años 80, con 20 millones de habitantes, se requerían 11 mil megavatios, de allí que el déficit de generación de energía es evidente”.
—Este déficit se da por la falta de mantenimiento en toda la estructura generadora, se da por la desprofesionalización del sector, ya que ingenieros y especialistas en la materia en un 80 % se han ido del país, además que la crisis económica severa a la que han llevado al país no les permite ahora comprar repuestos importados y no hay disponibilidad -afirmó-.
Corrupción eléctrica
Destacó que el otro factor negativo es la corrupción de las autoridades en materia eléctrica, porque no hay inversión en adquisición de equipos de generación termoeléctrica, ya que las recomendaciones adquiridas no eran las más indicadas, adquirieron en maquinaria para emergencia y no para uso continuo, “por eso el cementerio de maquinaria generadora y distribución está por todo el país”.
Para el ingeniero Winston Cabas, la falta de combustible para las termoeléctricas es otro factor que agudiza la crisis en el sector. “Planta Táchira, por ejemplo, requiere para operar 108 gandolas diarias de combustible, pero no hay esa cantidad y mucho menos como transportarla, cuando el Gobierno debió haber construido un gasoducto”, expresó.
—Igual están las termoeléctricas de Barrancas, Guanapa, Batalla de Santa Inés y otras dos, que requieren 77 gandolas diarias de combustible y el Gobierno no tiene capacidad para ponerlas a funcionar; por eso, Táchira, Trujillo, Mérida, Barinas, Portuguesa y Zulia tienen tantos problemas de energía eléctrica, por el déficit de generación termoeléctrica -refirió el experto-.
Aseguró que el problema se va agudizando porque en la Uribante Caparo, La Vueltosa-San Agatón y Planta Páez, hay graves dificultades y “el Gobierno no tomó las previsiones adecuadas, aun a sabiendas que ya todo el sistema eléctrico nacional cumplió su vida útil”.
Augusto Medina