A juicio de Javier Tarazona, director general de FundaRedes, una vez más Nicolás Maduro deja en evidencia su complicidad y apoyo a los grupos irregulares armados colombianos, cuando los invita a venir a Venezuela a ejercer sus actividades, situación que ha permitido que ocurran en territorio venezolano enfrentamientos en Ureña, hechos sangrientos que se han vuelto recurrentes en los últimos meses.
“A confesión de parte, relevo de pruebas. Esta bienvenida que les da Maduro a los grupos irregulares, es la confirmación de todas las denuncias que se han hecho al respecto y por ello deploramos que quienes hoy ostentan el poder permitan la expansión de más de 30 frentes de grupos irregulares en 14 estados de Venezuela, con extorsión, narcotráfico, asesinatos, entre otras situaciones, como las constantes balaceras en los municipios colindantes con Colombia”, advirtió Tarazona mediante una nota de prensa.
Reiteró el director general de FundaRedes que el enfrentamiento entre los grupos deja numerosas víctimas y ocasiona que, en las últimas semanas, el comercio en la frontera haya cerrado debido a las amenazas por no pagar la extorsión. “La frontera es territorio de nadie, no hay control y la gente está aterrorizada porque se le vulnera el derecho a la vida, al trabajo, a la actividad privada, al libre tránsito, entre otros tantos”.
Indicó Javier Tarazona, durante rueda de prensa, que los grupos irregulares que operan en la zona de frontera ocupan la escuela en Tienditas, municipio Pedro María Ureña, a pocos metros del puesto de control de la Guardia Nacional Bolivariana, y ya dieron la orden de que los uniformados desalojen el punto para tomar el lugar y ejercer la autoridad.
“Es insólito cómo una vez más se puede evidenciar la amplitud del poder de los grupos irregulares, que operan con el amparo de las autoridades educativas y de seguridad, quienes les permiten ocupar los planteles para desde allí extender sus operaciones, como el caso de la escuela de Tienditas, donde los miembros de estas organizaciones se han asentado y desde allí ordenaron desplazar a los guardias nacionales”, dijo Tarazona.
Recordó la toma de la Escuela República de Cuba, en San Antonio, municipio Bolívar, que ocurrió en febrero, durante los sucesos vinculados al ingreso de la ayuda humanitaria a Venezuela.
Entre algunas de las denuncias hechas por Javier Tarazona, destacó el señalamiento de la presencia y control por parte de los grupos irregulares armados en zonas de los municipios Capacho Viejo y Capacho Nuevo del estado Táchira, específicamente por células del Ejército de Liberación Nacional (ELN), por lo cual exigió a quienes controlan las Fuerzas Armadas que detengan el avance de los terroristas en este territorio, donde están secuestrando personas y cometiendo otros delitos graves.