Más de 600 familias esperan este año contar con el servicio, luego de cuatro años de larga espera
Por Raúl Márquez
Habitantes de la comunidad de Naranjales, en la parroquia Alberto Adriani del municipio Fernández Feo, exhortan, una vez más, a los representantes de la empresa Cantv a iniciar las labores de conexión del servicio, argumentando, que van a cumplir cuatro años sin el mismo, tras una serie de robos del cableado principal.
Aseguran que la problemática se originó, justamente, con el hurto de los cables en un tramo entre La Morita y San Rafael de El Piñal, que dejó sin tono ni internet a más de 600 familias.
Comentan que desde ese momento, tras notificar a los técnicos de la oficina de San Cristóbal sobre lo acontecido, esperaron varios meses, sin obtener ninguna respuesta.
Una solución que no llega
Luego de tanto insistir, las plegarias de la comunidad, ubicada en el sur del Táchira, activaron a la empresa, así como a la alcaldía de la referida jurisdicción, que se comprometió a apoyar en lo que fuera posible.
De este modo, la esperanza de que pronto contarían con el servicio, nuevamente, se perfiló como una realidad cercana.
Juana de Vargas, líder social del sector, indicó que se llevó a cabo una reunión, en la cual se planteó un plan de trabajo.
«El alcalde, Haylly Chacón, se comprometió en apoyar con materiales, como cemento y cabillas, para la construcción de la base de la central telefónica o nodo. Además, con unos obreros. Entre tanto, los afectados quedamos en colaborar con 10 mil pesos para gastos propios de la obra, mientras que los representantes de CANTV iban a traer los cables de fibra óptica y otros equipos necesarios para el nodo», detalla la luchadora comunal.
Precisa que la alcaldía cumplió y que, en efecto, unas 200 personas colaboraron con el dinero, pero ahora solo esperan por la empresa.
«En octubre, sin mal no recuerdo, círculo un audio por WhatsApp en el que un ingeniero de la empresa le notificaba al alcalde que ya iban a traer el equipo que hace falta para iniciar los trabajos de reconexión, pero pasaron los meses, llegó el nuevo año, y seguimos esperando».