¿Qué pasará con los buscamas que salen a diario de la frontera?
26 de abril de 2024
En las últimas semanas se ha observado lo que pareciera ser un aumento en los casos de abuso a niños, niñas y adolescentes, pero se ha determinado que muchos de ellos son de vieja data, que venían ocurriendo desde hace algún tiempo y que ahora la cuarentena social y el acercamiento de los padres a sus hijos, ha contribuido para que revelen lo que estaba ocurriendo.
Por Armando Hernández
Mantener un mayor contacto con los hijos, conversar con ellos, ganarse su confianza y no poner en duda las cosas que cuentan, forman parte de las recomendaciones que expertos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas hacen a los padres de familia, a los efectos de detectar situaciones de abuso infantil y proteger a sus hijos de depredadores sexuales, que en la mayoría de los casos están en el mismo entorno de la víctima, por lo que esta prefiere guardar silencio por temor a represalias en su contra o contra sus seres queridos, más aún si ha recibido amenazas por parte del abusador.
Voceros del Cicpc-Táchira, a cuyo frente se encuentra el comisario Wílmer Uribe Guerrero, explicaron que la violencia sexual contra niños, niñas y adolescente es uno de los delitos que están siendo atacados fuertemente por las autoridades, a instancias del director nacional, comisario Douglas Rico, que ha dado instrucciones para que se desarrolle a nivel nacional una campaña de prevención, dirigida tanto a los niños como a los padres y a la comunidad en general.
Casos de vieja data
Las inspectoras Neglis Contreras y Gladys Cáceres, jefas de la Brigada Contra la Violencia Intrafamiliar, de la delegación municipal de San Cristóbal, son el nervio motor de las investigaciones que en materia de violencia se desarrollan a nivel regional. Con 43 casos resueltos en lo que va de año, se han encontrado con una particularidad que llama la atención, pues en la mayoría de los casos se trata de hechos que venían ocurriendo desde hace tiempo, pero que por diferentes razones no fueron detectados a tiempo por los padres. No se tenía conocimiento porque la víctima prefería mantener silencio.
Consideran que la cuarentena social ha influido para que se sepa de estos casos, pues los padres ahora comparten más con sus hijos, están en el mismo lugar, conversan, juegan y se ganan la confianza de los muchachos. Al aumentar los lazos de amistad con los niños y adolescentes, progresa la confianza que debería existir entre padre e hijo, y eso permite que cuenten sobre situaciones irregulares que estén afrontando
Expresaron que muchas de las situaciones de abuso sexual a niños, niñas y adolescentes, que han sido aclaradas en las últimas semanas, en realidad venían ocurriendo desde hace tiempo y se descubren porque los padres y representantes están más cerca de ellos, notan los cambios de actitud ante determinada situación o la presencia de ciertas personas.
El violador sigue siendo violador…
Expresaron los funcionarios del Cicpc que el violador no deja de ser violador y la pandemia del COVID-19 no lo detiene; por el contrario, se convierte en un factor para que siga violando. El niño siente miedo del violador y teme, tanto por su seguridad como por la de sus padres y demás familiares, más aún si ha sido amenazado.
No obstante, aclaran, las cosas han cambiado porque los papás y las mamás están más atentos a los niños. Conversan y les expresan cariño y amor, lo que hace que se rompa la barrera y confiesen a un familiar de su confianza lo que está ocurriendo.
Hoy la realidad es otra porque el Cicpc ha hecho un gran trabajo de difusión y la gente se ha dado cuenta de que los casos de abuso de género y abuso sexual deben ser denunciados de inmediato. Ahora las personas tienen más confianza en la policía, en ir a denunciar, y en esto han influido los niveles de propaganda que en las redes sociales está desarrollando el Cicpc a nivel nacional, por instrucciones del director Douglas Rico. Los anuncios han sido vistos por los niños, que leen lo que se dice y confiesan más rápido, ven que algunos casos fueron resueltos y piensan que, así como ayudaron a otros niños, también los van a ayudar a ellos.
Conducta aprendida
Independientemente que el abusador esté detenido, este es un crimen que marca a la persona abusada para toda la vida. Surgen las llamadas conductas aprendidas y allí deben estar muy pendientes los padres. Si ven que un niño está realizando actos sexuales antes de tiempo, como tocar o exhibirse, se debe preguntar por qué lo hace, ya que tienden a repetir conductas, quieren repetir lo que a él le hacen. Hay que estar muy atentos con esas conductas, y creerles a los niños lo que dicen, porque dicen la verdad, y no dudar de su testimonio, pues para que confiese debe estar muy afectado y los padres y representantes, ante el menor signo de alarma, están en el deber de acudir a los cuerpos de seguridad, que les prestarán la ayuda que necesitan.
Es importante procurar ayuda para la víctima, porque esos niños o adolescentes abusados o maltratados, cuando lleguen a adultos, van a llevar esa secuela, y pudieran actuar de esa manera, por lo que se hace necesario prestarles ayuda especializada.
Los investigadores se refirieron a un caso ocurrido hace apenas meses en San Rafael, vía a Cordero, donde los detectives atraparon a dos hombres que supuestamente abusaban de varios niños, entre ellos un adolescente, hijo de uno de los violadores. Los funcionarios se percataron que en este caso ocurrió lo que se conoce como “conducta aprendida”, puesto que en las investigaciones se comprobó que el adolescente abusado, a su vez, abusaba de otros menores, haciendo lo que le hacían a él.
Para concluir, se dijo que tanto el violador como el pederasta y el abusador sexual en general, deben ser denunciados, sin contemplaciones de ningún tipo, porque lo que importa es detener esa situación.
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