Siguen los lamentos por los cortes de electricidad en los distintos municipios del estado Táchira. Los usuarios suplican por la ejecución de un cronograma más humano, con bloques de cortes menos prolongados.

Aseguran que la situación cada día es más insostenible por las diversas pérdidas de productos tanto en los hogares como en los establecimientos comerciales, sin contar las fallas en la telecomunicaciones cada vez que se registra una interrupción del fluido eléctrico.

El bienestar de niños, enfermos, y adultos mayores, también preocupa a sus familiares porque muchos requieren de energía eléctrica para la aplicación de tratamientos médicos, elaboración de actividades escolares, laborales, y hasta de distracción. De acuerdo con los infociudadanos son repetidas las ocasiones en las que disfrutan entre dos y seis horas de luz de las 24 que tiene el día, otros aseguran que sufren hasta seis interrupciones diarias.

En Pueblo Nuevo, parte alta de San Cristóbal, cerca del colegio de Contadores del estado Táchira, un angustiado padre implora diariamente por la disminución del número de interrupciones del servicio eléctrico y los largos periodos sin corriente porque en el sector viven pacientes que deben ser nebulizados cada ciertas horas, y no es posible cumplir las indicaciones médicas. Su hija es uno de esos casos, tiene una complicación en sus pulmones.

Rubio, municipio Junín, es otra de las zonas desde donde llegan quejan por los cortes indiscriminados de electricidad. Mismo panorama reportan desde Palo Gordo y San Rafael, municipio Cárdenas. Igual sucede en las zonas de montaña, norte y sur del estado. En fin, los pesares por los cortes de este servicio llegan desde muchos rincones de esta entidad andina.

Bleima Márquez
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