La maldad se ensañó la noche del sábado contra la Casa Hogar Medarda Piñero, en el centro de San Cristóbal, donde desadaptados sociales, sin escrúpulos y sin amor por el prójimo,  violentaron la reja de la cocina, penetraron a la institución y se llevaron la comida de los abuelos.

Los ladrones cargaron con pollos, queso, huevos y otros alimentos, así como las licuadoras y otros artefactos  eléctricos.  En el hurto, a Dios gracias, respetaron la vida de los residentes de la casa  hogar, donde viven adultos mayores y las reverendas hermanas Ravasco, Rosalía, Nora y Dolly, informó el colaborador del ancianato, profesor Omar Contreras Molina.

Esta casa hogar es un refugio para ancianos, quienes viven de la misericordia de Dios, de la caridad de tanta gente buena y del amor que las hermanas Ravasco les profesan.

Contreras Molina recordó que otrora siempre había un policía al cuidado de la institución, “pero la revolución lo quitó”. “Esperamos la solidaridad del pueblo de Dios, para donar una licuadora,  alimentos para nuestros ancianos, queso, pollo, huevos, carne”, expresó.

Este domingo, cuando se conoció la noticia, algunas personas dijeron que irían a colaborar, pero se requiere de la solidaridad de muchos para que los abuelitos vuelvan a tener sus alimentos y artefactos eléctricos.