Permanentes filtraciones de agua han destruido la vialidad del Pasaje Barcelona de Puente Real, importante arteria vial que conduce hacia Madre Juana. Los huecos son tan grandes que los vehículos y los transeúntes no tienen por donde pasar sin ser salpicados o sufrir un accidente
Bleima Márquez
La capa asfáltica del Pasaje Barcelona, entre calles 9 y 11, de Puente Real, está prácticamente destruida y dificulta el tránsito vehicular y de las personas que diariamente pasan caminando. Los daños son enormes y están a la vista de todos.
Según vecinos del sector, el problema que les aqueja data de varios años y a pesar de los llamados a las autoridades de la Alcaldía de San Cristóbal y de Hidrosuroeste no hay respuestas. Aseguran que cada día es más difícil la movilidad por ese tramo. Los vehículos sufren daños a causa de las imperfecciones de esa importante vía.
José Nieto dijo que el motivo del severo desgaste de la calle es un constante bote de aguas residuales que ninguna autoridad ha reparado por lo que hizo un llamado a la Alcaldía y la Gobernación del estado para que se enfoquen a solucionar la situación.
Afirman que son muchos los vehículos que han sido perjudicados, sin contar el riesgo de sufrir un accidente de las personas que transitan a pie, ante las maniobras de los conductores para esquivar los enormes y profundos agujeros.
“Estas aguas servidas afectan el tránsito tanto vehicular como de los transeúntes porque son cloacas prácticamente lo que hay aquí en esta zona”, comentó e insistió en el llamado a las autoridades para que pasen y verifiquen la crítica situación generada en la zona.
Ciro Fajardo, quien pasa a menudo por ese destruido trayecto, señaló que el problema tiene tanto tiempo que ya olvidó cuando comenzó.
Para este usuario el origen del problema podría ser filtraciones de una quebrada que pasa cerca porque siempre está lleno de agua. “Un día caí y fue un desastre el tren delantero. Se partió un muñón”, lamentó.
Epifanio Moreno, vecino del sector, declaró que “todo el tiempo está el botadero de agua. Todo el tiempo se ha visto y mire como tenemos las calles y no ha habido la forma de lograr una solución.”, hizo un llamado al gobernador Freddy Bernal y al alcalde de San Cristóbal, Silfredo Zambrano, para que se aboquen a solucionar el problema.
“Pueden ser cloacas o filtración de la quebrada, lo cierto es que a diario hay agua y la calle está destruida”, aseveró Moreno.
Otros habitantes de este populoso sector de San Cristóbal sostienen que físicamente la calle está muy dañada, y para evitar accidentes mayores han rellenado los huecos con cauchos y otros materiales. A simple vista, ese tramo parece una cancha de obstáculos para entrenamientos extremos.
Destacaron que la situación ha empeorado porque justo por allí se pasa la cola de las unidades de transporte público para surtir combustible. El espacio de la arteria vial se reduce y obliga a los vehículos a pasar por las imperfecciones. Tanto los conductores de las busetas como los vecinos de la zona y otros usuarios del Pasaje Barcelona están muy afectados.
Alcantarilla tapada
Pocos metros más adelante de las troneras formadas por las filtraciones de agua o, tal vez, sistemas de cloacas colapsados, como quien se dirige al sector Madre Juana, una alcantarilla dañada llama la atención de los transeúntes y pone en riesgo el bienestar de los vehículos.
El desagüe está repleto de objetos, hasta una colchoneta, y la rejilla requiere ser reparada. Vecinos alertan que la zona podría colapsar si no hacen mantenimiento. Temen que las semanas avancen y lleguen las lluvias.
Los vecinos insisten en que el Pasaje Barcelona es una vía importante por el denso tráfico automotor que diariamente se desplaza por la zona, pero tiene muchos problemas, en especial las filtraciones que han destrozado la capa asfáltica y ahora advierten que de no reparar la alcantarilla el problema podría empeorar.