Con una marcha que partió desde el Parador Turístico de Capacho Nuevo hasta la plaza La Glorieta, familiares de los 10 tachirenses detenidos en El Salvador, exigieron la libertad de sus seres queridos, ante la ausencia de respuestas.

Desde las 10 de la mañana, madres, esposas, hijos y amigos de Andry Hernández, Widmer Sanguino, William Lozada, Edicson Quintero, Jorge Guerrero, Wladimir Vera, Carlos Uzcátegui, Wilmer Sandía, Gustavo Agüero y Luis Chacón, se concentraron para exigir una prueba de vida de sus familiares y la libertad absoluta de cada uno de ellos.

Reina Cárdenas, amiga de Andry Hernández y vocera de los familiares, exigió al presidente Nayib Bukele la liberación del estilista oriundo de Capacho y de todos los tachirenses y venezolanos detenidos arbitrariamente.

“Queremos una fe de vida de él, porque la Secretaría de Seguridad Nacional de EE.UU., dijo que Andry era responsabilidad de El Salvador y queremos que nos dé una respuesta”, añadió.

Con el lema “Tener tatuajes no te hace delincuente”, las familias recordaron que todos los jóvenes tachirenses allá detenidos.