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21 de mayo de 2024
Freddy Omar Durán
A partir de las denuncias hechas en su contra por una vecina, quien afirmó no soportar los olores que emanan de un emprendimiento de su propiedad, ubicado en las cercanías, en la Urbanización Santa Rosa de La Concordia, Edgar Bazó dio respuesta a Diario La Nación sobre la denuncia hecha.
Aclaró que su emprendimiento de ahumado de cerdo, con el cual lleva alrededor de 4 años, que requiere la utilización de hornos, no ha afectado a ningún vecino, y que incluso ante las quejas de la demandante, cuya residencia se encuentra alejada un par de casas, se llamó a una reunión extraordinaria entre los vecinos para aclarar si otra persona manifestaba molestia por malos olores.
— A raíz de las quejas que nos transmitió un abogado de la señora, y las recomendaciones de los bomberos de San Cristóbal que hicieron una inspección, y de acuerdo con las normas Covenin, se levantaron las chimeneas más de seis metros. Además cuando el humo sale, es muy raro que lo haga hacia adentro de la urbanización. Es imposible a esa altura de la chimenea que el humo llegue hasta la casa de ella— subrayó Bazó.
Mostró los soportes de las inspecciones realizadas por la alcaldía, el consejo comunal y los bomberos, y en ninguno, amén de las respectivas recomendaciones, reportó irregularidad alguna. Con carpeta en mano, aseveraron estar al día con toda la permisología que el tipo de negocio que tienen requiere.
—El domingo 28 se hizo una reunión con toda la colectividad y la participación de más de 30 personas. Se me solicitó que activara el horno y se hizo a las 3 de la tarde. A eso de las cinco de la tarde se hizo una visita casa a casa preguntándoles a las personas si han percibido olor a algo ahumado, y ninguno lo detectó— añadió Bazó.
La señora que vive precisamente al lado de la casa donde se ahúman cerdos, Consolación Suárez habló de la situación y confirmó que para ella no se causa ningún tipo de molestia, y desmintió que su casa estuviese deshabitada como se insinuó en la denuncia.
–Nosotros no queremos hacerle daño a la señora vecina, la apreciamos porque llevamos más de 45 años conociéndonos porque somos fundadores de la urbanización, y somos casi familia. Sí les hemos prestado atención a las acusaciones de ella, hemos estado pendientes y vigilantes, y dejamos de trabajar 3 meses para demostrar que el humo que ella huele no viene de acá— dijo.
Están preocupados porque esas acusaciones afectan su modus vivendi, y pidieron que algún familiar de la denunciante en Venezuela la acompañen y den fe de que si o no llegan los olores que ella manifiesta le molestan. Sostienen que la limpieza de la urbanización es para ellos lo primero y que no lanzan desechos de la materia prima al terreno baldío con el que colindan, y menos a casas vecinas.
Desmintieron que ellos realizan su actividad productiva a altas horas de la noche, por eso les extraña que ella diga que ha tenido que salir a las 2 de la madrugada fuera de su vivienda para dormir en el carro.
Finalmente, Bazó informó que en la casa donde tiene el emprendimiento vive su señora madre, octogenaria, quien sobrevivió al covid-19 y que él para nada haría algo en contra de su salud.
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