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7 de septiembre de 2024
Su calidad vocal despierta admiración en quienes tienen la oportunidad de escucharla cantar
Norma Pérez
A Eliana Estefanía Vargas Gómez, su mamá le cantaba desde antes de nacer. Quizá esta es la génesis del talento innato que esta jovencita rubiense demuestra cuando interpreta alguno de sus temas preferidos.
Durante los meses de embarazo, arrullaba con canciones populares a ese pequeño ser que crecía en su vientre. Siempre le gustó cantar, al igual que a sus hermanas.
Recuerda que su primogénita, cuando dijo las primeras palabras, demostró aptitudes artísticas: Desde que empezó a hablar, también comenzó a cantar. Agarraba un peine y lo usaba como micrófono para repetir los temas de Selena y bailaba. Su preferido era “Como la Flor”.
Se siente muy orgullosa de los avances de su hija en este campo, pues con solo doce años de edad despierta admiración en quienes tienen la oportunidad de escucharla.
Arte y cultura
De su progenitora, Eliana heredó el nombre y las aptitudes artísticas que hoy despliega cuando sube a un escenario e impresiona por su calidad vocal:
“Desde muy pequeña oía e intentaba imitar la manera en que lo hacían los cantantes. Así sin saberlo, ya practicaba, y cada vez me salía mejor. Cantar es un mundo con muchas posibilidades. Me encanta el arte y la cultura”.
Acaba de culminar el primer año de bachillerato con excelentes calificaciones, pues es una destacada estudiante que dedica gran parte de su tiempo a cumplir con sus asignaturas, sin dejar de hacer lo que le gusta.
“Pienso que sacar una mala nota en mis estudios no está bien, pues tengo mucho tiempo libre que debo dedicar a aprender para continuar con mi formación educativa. Aun así, tengo oportunidad para practicar canto o la ejecución de algún instrumento”.
Nunca ha estudiado canto, pero su capacidad es innegable y así lo demostró durante el festival de Corazón Llanero, en el que participó cuando tenía nueve años de edad, y su destacada actuación la ubicó en el cuadro ganador.
“Me encantan las canciones viejitas, porque siento que son superiores a muchas de las de ahora, que no tienen buen ritmo, contenidos, sentimiento o armonía”.
También es integrante de la agrupación Eli Dance, donde canaliza su inclinación por la danza ballet.
Actualmente incursiona en La Voz Kids San Cristóbal, donde después de superar varias rondas eliminatorias, fue seleccionada para competir en la final.
El futuro
Aun cuando le queda mucho por crecer y un camino por recorrer, ya piensa en lo que desea hacer en los próximos años: cursar la carrera de Arquitectura y convertirse en una profesional, pero nunca abandonar lo que la inspira.
“Deseo continuar con la música a la par de mi carrera universitaria. Son dos escenarios que puedo complementar y sacarlos adelante”.
Define la música como un elemento vital en su existencia, que no piensa abandonar, sino al contrario, cultivar y fortalecer.
“La música es algo muy importante, nos permite expresarnos a través de los sonidos. Es un don, nos hace sentir muchas emociones, puede ser tristeza pero también felicidad”.
Quiso dar un mensaje a los niños y jóvenes que al igual que ella, tienen sueños y aspiraciones:
“Si tenemos un don hay que expresarlo, mostrarlo al mundo, abrirse y enseñarlo. Estoy segura que así nos sentiremos mejor cuando hacemos lo que nos gusta y lo que queremos”.
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