Regional
Usuarios trancan adyacencias de una bomba por surtir a clientes “vip” y no a quienes madrugaron a hacer cola
22 de septiembre de 2017
Los usuarios de la estación de servicio Korinú no aguantaron seguir viendo cómo quienes hacían una cola paralela, que supuestamente formaban los isleros en presunta complicidad con funcionarios de seguridad, por pagar al parecer entre 5 y 10 mil bolívares, tenían la prioridad para surtir, mientras en la fila de quienes hacían cola desde las cuatro de la mañana, a las nueve y veinte, no había “corrido ni un carro, una cuadra, pero por los que no esperaron más y se fueron”.
Así lo dijeron, en la mañana, Andrea Torres, Nelly Palencia, Eduardo Ramos, Richard Chacón, Álvaro Silva y Elkin Vera, entre otros usuarios que a esa hora decidieron unirse y trancar la calle, para evitar a los clientes “vip” -o los que pagan para no hacer la cola- y “obligar” a los funcionarios de la Zodi a retirar los carros que se encontraban en las adyacencias y que estaban a punto de pasar, por encima de quienes estaban organizados en la cola desde la madrugada.
“Se nos estaba coleando la gente, y ahí está la Guardia y no hace nada; los bomberos lo que hacen es pelear con uno. Esto es horrible, primero no había sistema, se pasó, entonces comenzaron a las ocho de la mañana a echar gasolina, pasa una hora y la cola no corre, y vemos que metían y metían carros. Nos fuimos hasta la bomba y estaba pasando un poco de gente, y es que no puedo creer que haya Guardia y esté como pintada en la pared, y usted les dice algo y responden ‘qué puedo hacer’. Y nosotros preguntamos: ¿Para qué están ahí? ¿Para cobrar plata? La situación es horrible por esa cuerda de corruptos; todo lo que hemos madrugado y dejan que se meta así la gente” -dijeron-.
La cola abarcaba varias cuadras y, según los usuarios, era la única estación “disponible a esa hora de la mañana, porque le había llegado la gandola; a la de la Unidad Vecinal no, tampoco a la de la plaza Miranda. Sencillamente, lo que está pasando aquí es simplemente que unos estamos desde las cuatro pero llegan otros ahorita a meterse porque les dan plata a los guardias y eso no debe ser, no es justo. Aquí todo el mundo se da cuenta de esa realidad, yo tenía que ir a hacer el almuerzo, pero ahora no me voy hasta que no retiren todos esos carros que están esperando que los llamen para surtir” -agregó otra usuaria-.
— Que la Guardia ponga orden, todos esos carros son los que se están coleando, siempre es así, pero hoy es demasiado el descaro. Ahora nos dicen que estamos obstaculizando, pero y por qué no quitan los carros que están estacionados sin hacer cola en las adyacencias.
Hay que meter a los funcionarios
Un islero manifestó, ante la denuncia, “que madruguen más”, y otro señaló que “los que vienen a echar son puros funcionarios, que si el guardia, el Sebin, y esos hay que meterlos, qué hace uno, uno colabora. Ahorita vino un señor que lo iban a dializar, imagínese, el señor con la bolsa y todo aquí; hay que colaborar”.
Según los usuarios, un funcionario aseguró que los carros estacionados eran del Sebin, pero, molestos por el “abuso”, se preguntaron: “¿todos esos van a ser del Sebin? Corruptos, cómplices”.
Otros advirtieron que la situación de “abuso” tiene meses, pero ya la gente “no aguantó y explotó, y si continúan así en las bombas, seguirán explotando, porque en cualquier parte, quien hace la cola es quien tiene la prioridad en un servicio”.
Con la reserva y gente
de otros municipios
En otras estaciones de servicio en La Concordia, como la de la Rotaria, donde la cola era considerable, trabajaron con la reserva, después que el conductor de la gandola les informó que ya la había llenado de combustible.
Un funcionario de la estación de servicio comentó que desde hace una semana la gasolina les llega normalmente, pero advirtió que la cola se debe a que “hay mucha gente de los pueblos que se está viniendo a ‘tanquear’, de Pregonero, Seboruco, La Grita, de la vía al llano, El Piñal, Colón. Esa gente no tiene gasolina por allá, uno conoce ya a los clientes constantes que llegan aquí y hay mucho cliente de afuera de San Cristóbal; es más, yo nunca había visto que llegara tanta gasolina tan seguida y que no pasara la cola”.
Agregó que la mayoría de los cisternas que están llegando al estado vienen de la planta de Yagua, Valencia, Bajo Grande, pues “los gandoleros llegan perdidos, no saben dónde están, dicen que en El Vigía no hay gasolina”.
En la bomba de la Unidad Vecinal, donde una cola llegaba a la parte posterior de la iglesia y otra a la avenida Lucio Oquendo, detrás del Hospital Central, según informaron usuarios que estaban en cola, como Ramón Carvajal, estaban esperando que el chofer cargara en la planta para comenzar a trabajar con la reserva, pero alegaban que solamente tenían para doscientos carros; “yo llegué a las cinco de la mañana y estoy de tercero, pero no han despachado a nadie”.
De igual manera, hubo estaciones de servicio cerradas, como La Esperanza, la del Gimnasio, la Continental y La Guacara, donde la gandola llegó a media mañana.
Marina Sandoval Villamizar