Daniela González

Catorce días de tortura, amputaciones y vejámenes fue lo que vivió el comerciante P.P. Depablos, durante su cautiverio, en un lugar desconocido, que se presume haya sido en territorio colombiano.

Según un vocero policial, el hombre de 53 años de edad, natural de Las Delicias, municipio Rafael Urdaneta, salió de su casa para realizar la negociación de un vehículo y en ese acto fue sometido, bajo amenazas de muerte, por varias personas que las autoridades afirman tener plenamente identificadas y que en las próximas horas estarían logrando su captura.

Tras su secuestro, a través de las redes sociales se difundió un video, presuntamente filmado el día 8 de septiembre, donde se visualiza al hombre pidiendo ayuda a sus familiares para recaudar el dinero solicitado, y donde lamentablemente mostraba que sus captores ya le habían amputado un dedo, y en caso de no haber una respuesta a la exigencia económica, a las seis de la tarde de esa fecha le sería amputado otro dedo.

Ante la fuerte presión policial y la investigación que el Conas estaba llevando a cabo, el sábado, a las 6:30 de la tarde, lograron la liberación del comerciante, en San Antonio del Táchira.

Extraoficialmente, se pudo conocer que Depablos mantenía un buen estado de salud física, pese a la amputación del dedo meñique y un dedo del pie, a lo que fue sometido por parte de los delincuentes, que al parecer no lograron recibir el dinero por el rescate de este reconocido comerciante del Mercado Mayorista de Táriba.

El hombre logró encontrarse con sus seres queridos en la sede principal del Gaes Táchira, quienes agradecieron a los efectivos por su liberación.