Una niña de siete años fue sacada a la fuerza de la casa familiar, para luego ser golpeada y abusada, al parecer por dos hombres. CICPC inició las pesquisas y por el hecho detuvieron a un hombre que llaman “El Mono”, el cual tiene prontuario policial. Habitantes de Paraguaná exigen justicia   

Raúl Márquez   

El vil asesinato de una niña de siete años de edad, ocurrido el pasado viernes en el sector Victoria Popular del municipio Los Taques del estado Falcón, tiñó de dolor e impotencia el fin de semana para los habitantes de este pueblo pesquero de Paraguaná.

Las primeras versiones señalan que a la pequeña Alejandra Xaviela Padilla Córdova, la sacaron dos hombres a la fuerza de la casa de sus padres. Acto seguido, la golpearon, asfixiaron y abusaron de ella hasta dejarla sin vida, en una zona enmontada de dicha comunidad.

Tras el hallazgo del cadáver, funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana y de la Guardia Nacional resguardaron la escena del crimen hasta la llegada del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) delegación Punto Fijo.

El cuerpo de Alejandra ingresó a la sede del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf) de Punto Fijo, pasadas las 8:00 de la mañana para que le fuera practicada la necropsia de ley.

Se pudo conocer que la víctima es hija de Alejandro Saviel Padilla Díaz, pescador de la zona y miembro del Consejo de Pescadores Aurora.

Capturan a uno de los sospechosos

Las actuaciones policiales que ejecutan los detectives de la científica, en torno al caso, comenzaron a dar sus frutos este sábado, con la detención de «El Mono», uno de los sospechosos. Este se materializó en La Salineta, frente a Villa Caribe.

Una vez puesto bajo custodia, los aprehensores debieron evacuar con urgencia del sitio al detenido, debido a que la comunidad enardecida pretendía lincharlo. Pasó a órdenes del Ministerio Público.

José Antonio Castro Silva, alias “El Mono”, quien posee un gran prontuario policial, hace 50 días estuvo detenido por posesión de droga. De hecho, la Fiscalía 13 lo presentó al tribunal, cuyo titular le otorgó la libertad, porque la droga incautada era de menor cuantía. Muchos opinan que quizá la menor estuviera viva, si los jueces lo hubiesen dejado detenido.

Un dolor profundo

Para familiares y allegados de la niña, el mundo pareciera haberse derrumbado. Duele la manera como se perpetró el crimen, en contra de un ser indefenso e inocente.

Duele su recuerdo, el eco de su vocecita en el aula de la sección «E» del primer grado de la Escuela Nacional Primaria de Los Taques, en donde su maestra, Yuranny Barreno, la recuerda como «una niña dulce».

A través de redes sociales la indignación se convierte en un grito de justicia. Coinciden los internautas que se esclarezca el caso cuanto antes y que sobre los culpables caiga todo el peso de la ley.