Sucesos
Fuente del Conas: ‘Blanquean pago de extorsión con transferencias
26 de septiembre de 2017
No queremos hacerle daño, solo protegerlo. Si no colabora con nosotros, entonces, quien sufrirá será su familia”, fue la advertencia que recibió Ángel Mosquera —su identidad la reserva por seguridad— por parte de un delincuente que integraba una banda de extorsionadores.
El comerciante zuliano afirma: “El mundo se me vino abajo cuando recibí la primera llamada. Fueron dos semanas de terror. Sabían todo de mí, de mis hijos y mis negocios; incluso, hasta por los lugares por donde transitaba con mi carro. Me vigilaban día y noche”.
Según Mosquera, le pedían transferir a una cuenta bancaria una alta suma de dinero. Gracias a las labores del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas) se logró desmantelar toda la banda y descubrir que la propietaria de la cuenta bancaria era una víctima más de los hampones.
La fuente militar de este organismo señala que no solo han visto con preocupación el incremento de las denuncias por extorsión, sino también “hay hampones que involucran a otras víctimas en el delito para blanquear el pago de las extorsiones. Usan su cuenta bancaria para que les hagan transferencias”.
Explica: “Una mujer vende su carro y le suministra al comprador los datos de su cuenta bancaria para que le deposite el dinero del vehículo. Sin embargo, el comprador es en realidad un extorsionador que utilizará esta cuenta bancaria para que su víctima le haga la transferencia.
La dueña del carro no sabe que el dinero depositado proviene del pago de una extorsión y le entrega el auto. En algunos casos los delincuentes devuelven la mercancía (carro) para que les regresen el dinero y, en otras oportunidades, extorsionan también a los dueños de las cuentas bancarias”.
Según cifras extraoficiales aportadas por un informante castrense, unas de las 450 víctimas de extorsión, en promedio, se atreve a denunciar ante el Conas, en Maracaibo. De acuerdo con el informante, un 60 % de ellos son jóvenes comerciantes digitales, mientras que el 40 % restante supera los 45 años y tiene sus negocios en locales.
El especialista explica que, actualmente, los delincuentes se valen de toda la información que divulgan las víctimas en sus redes sociales o páginas web sin tomar las medidas mínimas de seguridad.
A esto se le suma que muchas veces dentro del mismo entorno de la víctima está una persona que se vale de su confianza para suministrar todos los datos al grupo hamponil.
Unos 40 días les toma a la red de extorsionadores vigilar todos los movimientos de su víctima, antes de realizar el primer contacto, que puede ser por llamadas, mensajes de textos o sobre que contiene información personal detallada.
“Obtienen los datos de portales web de ventas y luego de seguir por 40 días a su víctima inician el acoso psicológico. Cerca del 25 % de los casos denunciados se maneja bajo este modus operandi”, asevera el informante.
Como lo vivió la valenciana Claudia Asturias: “Publiqué en las redes la venta de todos mis artefactos porque me voy del país. Me enviaron imágenes de las supuestas transferencias bancarias, por lo que entregué los equipos y al verificar en mi cuenta supe que me estafaron. Pero la pesadilla no terminó ahí, me llamaron y exigieron una alta suma de dinero para recuperarlos y no hacerme daño”.
La mujer de 31 años afirma que por tres semanas “la atormentaron con llamadas, y cuando apagaba el teléfono me enviaban mensajes de texto o correos electrónicos. Cambié de número telefónico y perdí todo”.
Pero no solo esta red actúa a través de páginas web, el militar asevera que llegan a sus presas tras hurtar o robar sus vehículos. Esto representa el 15 % de los casos denunciados.
“El 12 de marzo de este año no olvidaré: Dejé mi carro en el estacionamiento del edificio. En la mañana bajé para ir al trabajo y no estaba. Cerca del mediodía me llamaron para extorsionarme. Conocían toda mi vida. Denuncié y gracias a la presión del Conas pude recuperar mi carro, pero no se logró atraparlos”, narra aliviado Gaspar Montiel tras vivir tres días de angustia.
El experto en la materia advierte que transar el pago con estos delincuentes, aunque sea sola una vez, resulta suficiente para que siga siendo víctima de estos hampones que siempre están en busca de dinero para financiarse.
“Sabemos que es estresante porque la persona siente que está en riesgo toda su familia, pero los delincuentes una vez que saben que llevamos el caso, desisten y no cumplen sus amenazas”, aconseja el informante de Conas, tras pedir a las víctimas que denuncien para frenar el delito.
Asimismo pide a los vendedores ser precavido al momento de dar los datos de cuentas bancarias a extraños y denunciar si observa irregularidad en el comprador. (Cortesía de Panorama.com.ve)