Contrario a lo que inicialmente presumieron los expertos, en el sentido de que podría ser una de las dos jóvenes que desaparecieron cuando desde Táchira iban para Cúcuta, y que le observaron al menos una posible herida, el cadáver en avanzado estado de descomposición localizado la semana pasada, en Ureña, corresponde al de una dama extraviada de San Antonio del Táchira, y su fallecimiento fue causado por inanición, es decir, murió de hambre.
Todo esto se estableció plenamente, luego de que se le practicara la autopsia en la morgue del Cementerio Municipal de San Cristóbal, adonde los restos, casi esqueletizados, fueron trasladados el miércoles, luego de localizarlos en una zona boscosa de Tienditas, municipio Pedro María Ureña.
En la morgue se pudo conocer que fue muy poca la piel y músculo que el cadáver aún conservaba, por lo que se creyó en primera instancia que tenía una herida en el abdomen y eso hizo suponer que la víctima fue asesinada, pero esa apreciación obedeció al normal deterioro por su exposición a la intemperie, y por ello era esencial que la necropsia lo precisara, explicó uno de los investigadores.
Finalmente, la víctima fue identificada como Lisbeth Sugenny Cuéllar Hernández, de 47 años. Estaba desaparecida desde las 5 de la tarde, aproximadamente, del 6 de febrero.
Para cuando su familia, residenciada en la carrera 5 del sector Pueblo Nuevo, en San Antonio del Táchira, municipio Bolívar, se percató que no estaba, iniciaron la infructuosa búsqueda.
Flayers difundidos en redes sociales y algunos portales informativos fueron las herramientas a las que acudieron sus parientes para tratar de dar con su paradero, durante casi 20 días; sin embargo, en ese tiempo nadie ofreció alguna información posible sobre su paradero.
Sus restos fueron localizados la tarde del miércoles, en Tienditas, poco antes de las 5 de la tarde.
Unas personas que se movilizaban por la zona hicieron el hallazgo, específicamente en el sector Santa Cruz, cerca de una quebrada.
Una comisión de Politáchira, adscrita a la Coordinación Policial Tienditas, que verificaba la información, se quedó resguardando el sitio, al comprobar que era cierta.
Mientras que funcionarios de la Delegación Municipal del Cicpc-Ureña levantaron y trasladaron el cadáver hasta la morgue del Cementerio Municipal de San Cristóbal.
Aún se encuentran desaparecidas en la frontera dos chicas que, por distintas razones, viajaban a Cúcuta.
Luiris Daniela Ledesma Castro, de 19 años, desapareció el 8 de enero, y Ana María López Rincón, de 23 años, (MB)