Sucesos

Le devuelven la fe y esperanza a propietario de negocio incendiado

14 de febrero de 2022

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Se unieron en un radio maratón para ayudar a Santos.

Daniela González

Luego del incendio registrado en horas de la tarde del viernes en el “Taller y Lubricantes Santos”, de la población de La Fría, zona norte del Táchira, donde el propietario tuvo pérdida total del local comercial, la población del municipio García de Hevia se unió a un radio maratón que fue organizado por locutores de la jurisdicción, donde la bondad y solidaridad se hicieron presentes en cada donación que le enviaban a Calos Santos, víctima del hecho.
El radio maratón fue organizado rápidamente por Jhoan Carlos Rosales, locutor de Sonora F.M, y Luis Urdaneta, de radio Wao, en conjunto con otro grupo de profesionales de la comunicación que se unieron a la actividad, que se realizó en horas de la mañana del sábado, donde al iniciar la transmisión inmediatamente la solidaridad de los comerciantes y pobladores dejó en evidencia el noble corazón del tachirense, quienes se acercaban a la carretera Panamericana, entre carreras 14 y 15, lugar donde ocurrió el incendio, para entregar las ayudas y donaciones de materiales de construcción, limpieza, herramientas y demás apoyos que recibió Carlos Santos.
En el establecimiento comercial necesitaron maquinaria pesada para lograr remover cantidades de escombros calcinados, pues las llamas consumieron más de 35 años de trabajo e inversión que hizo la familia Santos en el taller.
Santos agradeció cada acción y donación que realizaron los habitantes del municipio García de Hevia.
“Estoy muy agradecido con todos los que me ha brindado su apoyo, que me han acompañado; gracias a Dios y la Virgen, a la gente, porque me han ayudado”, dijo el hombre al ser entrevistado en el radio maratón.
Ninguna ayuda fue pequeña para la víctima de este lamentablemente accidente, pues las personas donaron desde un kilogramo de harina, hasta cemento y materiales eléctricos, para lograr recuperar de las cenizas lo que en algún momento fue la fuente de trabajo de la familia Santos.