Tras un nuevo comunicado que circuló un día antes, en el que amenazaba a organismos policiales y militares venezolanos que operan en la frontera, también a algunos presuntos guerrilleros e incluso a algunos funcionarios, el cabecilla paramilitar conocido como el Paisa habría atacado a tiros este sábado la sede del comando 212 de la GNB en Ureña.
El ataque tuvo lugar cerca de las 8 de la noche, en la carrera 3, en la vía que conduce al Puente Internacional Francisco de Paula Santander. Previamente, según los pobladores, los paramilitares ordenaron durante la tarde, a los pocos comerciantes que tenían sus negocios abiertos, que los cerraran. Una especie de toque de queda.
Se dijo que la desproporcionada balacera contra el comando fue sin ninguna contemplación, pese a que los militares repelieron el ataque, pero no se conoció si hubo heridos o pérdidas humanas.
Sin embargo, en medio del pánico, algunos vecinos de Ureña se comunicaron con otras personas, vía WhatsApp, e informaron que la balacera que se presentó en las adyacencias de la plazuela de la población fue de tal magnitud que quienes se encontraban en ese sector debieron buscar refugio, así como lo hicieron los que cruzaban el puente internacional, de un país al otro.
Un día antes el Paisa, jefe paramilitar del Bloque Urabeño, como él mismo se ha identificado, envió un comunicado en el que amenazó a la GNB, al Cicpc y a la PNB, “y a cualquier colaborador de las guerrillas”.
Las amenazas fueron también directas a algunos funcionarios, con nombres o apellidos, por presuntamente colaborar con la guerrilla, “para todos ellos no habrá compasión alguna, su muerte será inminente”.
Menciona específicamente a tres del Cicpc, a seis de la GNB y a tres civiles, que presuntamente son “colaboradores” de la Guardia Nacional. Por otra parte, también amenaza, identificándolos por sus alias, a supuestos guerrilleros.
“Les estoy informando a toda la zona de San Antonio, Llano Jorge, no quiero ver a nadie, escuchen bien, a nadie es a nadie, después de las 8 de la noche en la calle, esto es para que sepan que vamos a entrar fuertemente armados a estas zonas; ya saben, están sobreaviso, ahora me dirijo a los hp guerrilleros, que son: alias tanga, alias wuill, alias paredes, el gordo jhon, alias mataperro. Están sobreaviso, ahora sí les llegó su hora, vamos a matar a todos ellos y quienes tengan contacto directo con ese grupo guerrillero”, refirió textualmente en parte del comunicado.
“No queremos ver a nadie en la zona de la carbonera ni la zona de la guaita, estos sitios son objetivo militar, este sobre es para q después no le estén llorando a un ataúd, la deban o no la deban, el q no acate este comunicado quiere decir q apoyan a el grupo guerrillero y a los estorcionadores de la GNB, la PNB, el Sebin, el FAES y el C.I.C.P.C.”, agrega textualmente otro extracto del comunicado firmado por el Paisa.
Diez días antes
Este sería el segundo ataque ejecutado en solo diez días en la población de Ureña por parte del grupo paramilitar liderado por el Paisa. El anterior fue de día 17 de julio contra la sede del Segundo Pelotón de la Tercera Compañía del Destacamento 212 de la GBN, en La Mulata.
Durante el intercambio de disparos, que se prolongó por espacio de 40 minutos, dos efectivos del Ejército resultaron heridos y un civil, al que las autoridades manejaron como una baja del grupo paramilitar, murió.
Sin embargo, luego se aclaró suficientemente que Franklin Geovany Velasco Chacón, venezolano, de 39 años de edad, como quedó identificado el fallecido, fue una víctima circunstancial del hecho, una trabajador inocente, ajeno a toda esa situación, al que mataron de un balazo en el abdomen y al que -aseguran- pretendían utilizar como un “falso positivo”, haciéndolo pasar por uno de los atacantes a la instalación militar. (MB)