Los resultados de la autopsia de ley señalan que la causa de muerte del niño fue un traumatismo craneoencefálico y parálisis respiratoria causada por múltiples contusiones. La madre y el padrastro del menor fueron condenados a 30 años de prisión

Arelis Teresa Álvarez Pérez y José Leonardo Mendoza Peña, de 32 y 36 años, respectivamente, fueron condenados a 30 años de prisión por su responsabilidad en el homicidio de su hijo, de un año y cinco meses de edad.

El hecho ocurrió el 29 de diciembre de 2023 en Maracay, municipio Girardot, estado Aragua.

Ese día, la madre del niño y su padrastro lo ingresaron de emergencia en el Hospital Militar de Maracay. Los médicos, quienes inicialmente trataron al infante por dificultades respiratorias, también hallaron que presentaba lesiones corporales.

Ante la situación, la pareja ofreció distintas versiones a los galenos. Sin embargo, ninguna explicó de forma convincente la gravedad de las lesiones que presentaba el niño, quien tras varios intentos de reanimación y entubación finalmente falleció, detalla una nota de prensa publicada este martes 14 de mayo en la página web del Ministerio Público (MP).

Los resultados de la autopsia de ley señalan que la causa de muerte del niño fue un traumatismo craneoencefálico y parálisis respiratoria causada por múltiples contusiones.

Ante tales hallazgos, los médicos solicitaron la presencia de funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) para aprehender a la madre y el padrastro, para dejarlos a disposición del MP.

Durante el juicio, la Fiscalía 16ª de Aragua ratificó la acusación contra Arelis Álvarez Pérez por el delito de homicidio intencional calificado y trato cruel. Además, se ratificó la acusación contra Mendoza Peña por el delito de comisión por omisión del primer tipo penal y trato cruel.

Una vez que la representación fiscal evaluó los medios de prueba inherentes al caso, el Tribunal 9° de Juicio en esa entidad dictó la referida condena en contra de la pareja y ordenó su reclusión en la sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) de Maracay, a la espera de un traslado posterior a otros centros de reclusión. /La Verdad