Tal como el resto el país, Guayana amaneció a oscuras. Desde las 4:00 de la mañana de este viernes 30 de agosto, dejando a los diferentes centros de venta sin energía y a los comerciantes con sus productos en los anaqueles debido a la falta de métodos de pago.

En un recorrido realizado por el centro de San Félix, los privilegiados son quienes tienen plantas eléctricas, mientras que quienes ofrecen productos congelados como pollos empiezan a preocuparse porque estos se estropeen.

Del otro lado de la ciudad, en Alta Vista, usuarios recorrían ansiosos los pasillos de los centros comerciales que cuentan con plantas eléctricas, fijándose minuciosamente en cuánta carga les queda a sus equipos móviles.

¿La causa de este apagón que afectó a más de 20 estados del país?

Según el ministro de Comunicaciones, Freddy Ñáñez, se trata de un “saboteo al sistema eléctrico”. Para el recién nombrado ministro de Interior Justicia y Paz, Diosdado Cabello, se trata de un ataque criminal y, rápidamente, responsabilizó a la oposición venezolana de esto en un programa transmitido por VTV.

“Ya nuestro presidente había anunciado que tenía información de ataques que iban a hacer al sistema eléctrico esta semana (…) Ya teníamos la certeza de que ellos estaban preparando ataques contra el sistema eléctrico”, puntualizó Cabello.

En contraste, el ingeniero especialista en sistemas eléctricos, José Aguilar, en entrevista con Correo del Caroní desestimó estas aseveraciones, a la par que encontró ilógico que sin investigación previa ni estudiar el caso, prácticamente desde el inicio del apagón, ya se estuvieran atribuyendo responsabilidades.

“No sabemos con certeza irrefutable la causa que haya provocado esto, pero es una falla que ha debido ser bastante cercana a Guayana, de modo que, con las condiciones que tenía el sistema a esa hora, derivó en un colapso. Hace tres días ocurrió otra falla, esa falla ocurrió pasadas las 7:00 de la noche y la recuperación fue bastante rápida. Entonces se volvió a citar el sector oficialismo de que esto es un sabotaje: sin tener las pruebas, sin haber investigado… Obviamente, si usted tiene una falla en la noche, es un tema de que es hora pico cuando Venezuela experimenta su mayor requerimiento eléctrico. Pero esta vez, estas en el extremo opuesto, no hay menor demanda en el día que la madrugada. Usted tiene que hacer una serie de maniobras en la red eléctrica para evitar que el sistema le colapse. No tenemos empresas básicas que mantienen una carga fuerte en el país. Venezuela no tiene los requerimientos que tenía, hay que empezar a desconectar cosas en el país para evitar colapsos del sistema. Seguramente cuando estaban en el proceso de restablecer los equipos, algo salió mal. Es por allí que es el problema”, acotó Aguilar.

Una teoría sin sustento técnico

Aguilar manifestó que la teoría de un presunto saboteo eléctrico por parte de la oposición venezolana carece de sustento técnico debido a la complejidad para hacer tal maniobra, tomando en cuenta que la mayoría de los líderes opositores permanecen en resguardo.

“Aquí lo que se ha hecho es disparar con la pistola en la cintura y es sabotaje. Sin haber investigado. Un evento como el del día de hoy y el que viene ocurriendo, lleva días poder analizarlo y decir: esto es lo que ocurrió. Yo descarto totalmente el sabotaje, es una cosa carente de la más elemental seriedad técnica. Las presentes autoridades le mienten al país, no son serios. Hablar de un sabotaje. Mira, un sabotaje requiere de alevosía, planificación y conocimiento. Otro elemento importante: acceso a poder ejecutar eso. Se lo están endosando a la oposición del país que no halla dónde resguardarse. Es absurdo. Ellos han mentido”, esgrimió.

Comercios no pueden vender

Mientras que especialistas y expertos debaten sobre las causas de este apagón, para los comerciantes las preocupaciones son otras: no pueden vender sus productos, ya que en el país el uso de efectivo no es común.

La falta de electricidad impide que los comercios puedan activar sus puntos de venta. Asimismo el problema se extendió hasta las telecomunicaciones evitando que se puedan hacer transacciones digitales para pagar.

“Un día como hoy yo vendo 30 pollos. Y hoy metí 15 y no los he vendido. Yo vendo a precio accesible y no trabajo con trampas. Necesito llevar mi comida a mi casa y por el corto tengo la venta parada. Yo apenas he pasado dos puntos porque la luz llegó un momentico y después se volvió a caer. Eso se fue desde las 4:00 de la mañana. Mi hijo tiene la granja sin agua, tenemos que pagar una cisterna para llevarle agua a los pollos porque están sin agua y no le podemos bajar comida porque se ahogan. Esto nos está perjudicando, aquí todos trabajamos con punto”, expresó una comerciante del centro de San Félix.

Mientras tanto, en las afueras de los centros de venta con planta eléctrica se formaron grandes colas, pero no para comprar, sino para permitir que el público cargara sus teléfonos en las calles.

“Esto afecta principalmente a las familias y bebés pequeños. Fíjate tú, ahorita estoy al lado de una planta cargando mi celular, esto afecta a uno aquí. Vivo con mi familia y tengo un nieto. Estamos afectados, prácticamente desde las 3:00 de la mañana sin luz y tampoco tenemos agua en la casa”, acotó uno de los transeúntes que, como todos los entrevistados, pidió reservar su identidad por temor a represalias.

Teletrabajo: laborar desde casa se vuelve cada vez más complicado

Fuera de las avenidas y el bullicio, también ampliamente afectados están quienes dependen de una computadora y conexión a internet para sostenerse. A pesar de estar en casa, los niveles de ansiedad suben cuando las personas que trabajan de forma remota no pueden reportarse ante sus jefes o cumplir con sus clientes que están en otros países y desconocen la crisis energética del país.

Correo del Caroní entrevistó a una comunicadora que labora con empresas dentro y fuera del país, quien manifestó que su trabajo es totalmente online y la situación evita que cumpla con sus labores.

“Trabajo con una empresa fuera del país. Completamente remoto. En este caso tengo un UPS que me permite tener wifi varias horas sin que haya luz, pero me quedé sin batería en la computadora y no puedo trabajar. Es complicado. La señal no está buena, entonces tuve que explicarles a mis jefes la situación, ya que tengo la pierna enyesada y no puede movilizarme a otro sitio. No puedo bajar escaleras para ir a un café. Se atrasa el trabajo, los clientes no siempre entienden. Ahora estoy trabajando con un wifi y logré cargar un poco la laptop, pero estoy trabajando a oscuras”, aclaró la entrevistada.

Correo del Caroní

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