El director de Política, Carlos Romero, dijo que “en un supuesto negado que la derecha llegara a la primera magistratura regional, se sumiría el Táchira en la más profunda oscuridad a consecuencia del desastre en que sería sometida nuestra entidad federal, puesto que tal y como lo han advertido en su campaña, utilizarían al Táchira y a su gente como arma y escudo de guerra, para destruir los logros de la revolución y dar un golpe de Estado, pues su único objetivo es asaltar Miraflores, igual como ha hecho Patricia Gutiérrez en el ayuntamiento, quien solo ha dedicado su gestión a propiciar la violencia y a cometer actos de corrupción, como la entrega de la recaudación de impuestos a Leopoldo López, expresándose a la luz del mundo el tráfico de influencias y desfalco”.

“Así actúa la derecha, buscando solo su beneficio, a costa del hambre y la miseria de la gente, sin importar si estos son chavistas, opositores o independientes, solo que les quede una buena tajada para engrosar su patrimonio”.

Calificó Romero como inmoral que la empresa de Leopoldo López se quede con el 15 % de los impuestos que pagamos los sancristobalenses, “cuando eso pudiera muy bien quedarle al municipio e invertirse en obras, tapar los huecos, recoger la basura, mejorar los parques y jardines, embellecer la ciudad, actividades que no las hace, y aun cuando son millardos de millardos, billones de bolívares, solo quedan en las cuentas personales de estos directivos de la derecha”.

Igualmente, dijo Romero que ella ha querido dar explicaciones de su ineptitud, pero nunca ha querido aclarar cómo es que lleva un ritmo de vida que solo magnates pudieran llevar, viajando por el mundo; “aún no ha explicado la mansión con piscina que adquirió recientemente en Colinas de Pirineos, así como sendos apartamentos en Caracas y Maracaibo, sin contar el parque automotor que posee la pareja Ceballos Gutiérrez, pues como es del conocimiento público, el único trabajo que ha tenido su cónyuge, luego que abandonara la UNET, fue el de diputado por un periodo y el de alcalde por un rato, mientras que ella pasó de ser ama de casa a alcaldesa y ahora tiene una inmensa fortuna que no tiene cómo explicar”.

Tampoco ha podido explicar la nómina paralela, ni su relación con una empresa de publicidad que tiene grandes privilegios, así como la situación de su suegro, que pasó de ser un humilde vigilante en Tovar a principal contratista de San Cristóbal.

Finalmente, dijo Carlos Romero que “así se ha comportado históricamente la derecha y lo de San Cristóbal es solo una muestra de lo que pudiera ocurrir en Táchira, si no razonamos nuestro voto e inteligentemente elegimos a la única opción de paz y progreso, encarnada en José Gregorio Vielma Mora”.