Más de un centenar de jóvenes recibieron su título de bachiller en la unidad educativa Colegio Los Andes
Norma Pérez
“La educación es una herramienta poderosa; la honestidad, la ética y la empatía son los pilares sobre los que deben construir su historia. Sean agentes de cambio positivo en sus comunidades, en su país y en el mundo. No olviden nunca sus raíces, los valores que se les han inculcado en sus hogares y en ésta, su casa de estudios”.
Durante el discurso que ofreció en el acto de graduación, a los integrantes de la Promoción 35 de Bachilleres en Ciencias, la Directora de la unidad educativa Colegio Los Andes, Nora Pérez, recordó la importancia de fortalecer su crecimiento académico con actitudes positivas, buenos hábitos y valores, que deben aplicar a la par de las enseñanzas y formación proveniente de sus hogares. “Ser buenas personas, las mejores versiones de sí mismo, es un proyecto de vida”.
“Quiero que lleven consigo no solo un título, sino también la confianza en ustedes y la certeza de que están preparados para afrontar los retos que la vida les depare. El mundo que les espera está lleno de incertidumbre, pero también de oportunidades. Sean curiosos, sigan aprendiendo cada día, no tengan miedo de equivocarse, porque de los errores también se aprende”.
Los despidió animándolos a forjar sus propios caminos, sin dejar de soñar en grande.
Acto académico
Más de un centenar de jóvenes, integrantes de la trigésima quinta promoción, epónimo “230 Años del Natalicio del Gran Mariscal de Ayacucho Antonio José de Sucre”, desfilaron alineados en pares, al ingresar a las instalaciones del gimnasio cubierto Luis Eduardo “el tierno” Gómez, de la Ciudad Pontálida.
Durante el recorrido, el Coro del Instituto Pedagógico Rural Gervasio Rubio- Upel, bajo la dirección de Ignacio Ruda, dejó escuchar una impecable interpretación del Gaudeamus Igitur, “alegrémonos, mientras somos jóvenes”. El himno de los graduandos.
El solemne acto fue presidido por los directivos e integrantes del cuerpo docente de la institución. Como invitados especiales, los padrinos de la promoción: Anthony Pérez, Miguel Credes y María del Carmen Montes, quienes hicieron entrega de las medallas a sus ahijados.
En representación de los padrinos, la profesora Montes se dirigió a los asistentes para manifestar que ser docente no es fácil, pero que existen muchos niños y jóvenes que hacen amar esta profesión.
“Celebramos el principio de otra etapa, en la cual se abrirán nuevas oportunidades, con todos los conocimientos y habilidades adquiridas en nuestra institución. Han logrado reconocer valores como la amistad, el respeto y el compañerismo, indispensables en nuestra sociedad”.
Sofía Sosa García, quien habló en nombre de los graduandos, agradeció a Dios y a la Virgen María, a los padres, a los docentes y al colegio por permitirles cumplir esta meta, que da inicio a una nueva, con rumbos diferentes de cada uno de los muchachos.
Seguidamente se hizo entrega de reconocimientos a los alumnos con mayores promedios, con más años en el centro educativo, a los padrinos y a los profesores. La directora Nora Pérez recibió los mosaicos de cada sección, que colgarán en las paredes de la institución.
El silencio reinó en el interior del recinto. Afuera, un día luminoso, abrazos, flores, risas, felicitaciones y gran algarabía. La emoción persistía.



