Tres acontecimientos extraordinarios, naturales, dignos de ser disfrutados, tendrán ocurrencia hoy lunes 21, un excelso preámbulo de Navidad, como una especie de compensación a las amarguras que 2020 nos deja. Un fenómeno astronómico, un fenómeno climático, y el tercero, que, si bien no puede llamarse fenómeno, es una tradición de muchos siglos, mucho antes de la fe cristiana, que hoy se reitera para su celebración.

El fenómeno astronómico, es la conjunción de Júpiter y Saturno, fenómeno que pudo haber sido la Estrella de Belén, según los estudiosos; en segundo lugar, este día marca el Solsticio de Invierno para el hemisferio norte, lo cual significa que hoy es el día que nuestro planeta está más lejos del Sol.

Y el tercero se trata de la cumplimentación de una tradición ancestral de las culturas nórdicas o celtas, que de alguna manera la exportaron como costumbre pagana al mundo occidental, y que ya muchos países latinos, entre ellos Venezuela, la han venido adoptando y celebrando con el ritual que es la parte de la tradición: La bajada o la visita del Espíritu de la Navidad.

La Estrella de Belén

“La Gran Conjunción” es la máxima cercanía, ópticamente hablando, que se produce entre los dos planetas más grandes de nuestro sistema solar. La unión de ambos gigantes se hace precisa justo hoy, pues antes del 21 venían acercándose y ya mañana comienzan a alejarse.

No solo nos parecerán juntos, sino que los veremos como una sola esplendorosa estrella, la misma que según los astrónomos modernos, pudo haber sido confundida en sus tiempos, con la Estrella de Belén, que guio a los tres Reyes Magos en la historia bíblica, cuando el nacimiento del Niño Jesús. 

Ambos planetas se alinean cada 20 años, pero no siempre tan juntos. Por eso, este año se espera que sea mucho más espectacular, dado que, la última vez que este fenómeno fue visto por los humanos, ocurrió en diciembre hace 800 años, exactamente, en el año 1226.

Desde el punto de vista astrológico, es la conjunción Júpiter-Saturno en Acuario. Ocurre porque Saturno entró al signo de Acuario el 17 de diciembre y allí pernoctará hasta el 8 de marzo de 2023. Mientras que Júpiter entró el 19 de diciembre para la conjunción y, por ser más rápido, sale el 29 de diciembre de 2021.

La conjunción planetaria, estará en activo hoy día, justo cuando se cumple el llamado Solsticio de Invierno, 21 de diciembre. Se podrá ver prácticamente en todo el mundo, a simple ojeada, levantando la vista en dirección al suroeste, de preferencia en un sitio despejado. Para quienes vivimos cerca de la línea ecuatorial, será visible por más tiempo.

Gracias a su gran luminosidad no es necesario contar con algún tipo de binoculares, o telescopios, pero sin duda, usándolos, el espectáculo se podrá disfrutar mucho mejor. Se pueden identificar porque Júpiter es el más brillante, y Saturno es más amarillo y más lento.

Hay que aprovechar, porque la próxima oportunidad para apreciar la conjunción, será el 31 de octubre de 2040.

Solsticio de Invierno

Con este fenómeno natural se da inicio a la última estación del año, el invierno, en los países donde hay cuatro estaciones. En el solsticio de invierno se presentan los días más cortos y las noches más larga del año, lo cual se debe a que, aparentemente, el Sol muestra la menor altura en el horizonte.

Por esto, para estos días, las horas de luz son menores y por consiguiente experimentamos temperaturas más bajas. Los “friítos de diciembre”, ya son un cotidiano decir popular. Pero hoy lunes, 21, día en que se inicia el solsticio, tiene la noche más larga del año, y el día más corto: Amaneció más tarde, y anochecerá más temprano que cualquier otro día del año, incluso que los de esta semana.

  

Espíritu de la Navidad

Esta fiesta se celebra con la llegada del solsticio de invierno, tradición que llega a nosotros desde el mundo celta que celebraba la llegada del invierno, y esta fecha se ha convertido en una celebración en la que los creyentes, se reúnen para bendecir al planeta y a los seres humanos.

Según la leyenda nórdica, hace más de 80 mil años un personaje de otra galaxia llegó a la Tierra y se instaló en territorio de lo que es hoy Escandinavia. Era un viajero, se dice, que predicaba el bien y las buenas relaciones entre humanos, y repartía regalos y bendiciones durante su recorrido.

Tradicionalmente, quienes festejan este evento desarrollan un ritual de bienvenida con el fin de aprovechar la fuerza y energía que desciende a la Tierra para traer paz y dejar sus enseñanzas a la humanidad.

Se dice que, en este día, específicamente entre las 10 y las 12 de la noche, solo por dos horas, el Espíritu de la Navidad baja a la Tierra y visita a todas aquellas personas de buena voluntad, ofreciéndoles un espacio propicio para hacer peticiones y agradecimientos.

El Espíritu de la Navidad retribuye paz, abundancia riqueza y amor a quienes practican su tradición y ponen en práctica los rituales apropiados, lo cuales pueden variar, aunque en esencia, consisten en tener la casa limpia para recibir al Espíritu sin malas energías.

Humberto Contreras

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