Opinión

El plan de negocios en una economía inflacionaria

21 de julio de 2025

3 vistas

Hogan Vega y Dorli Silva

El plan de negocios en una economía inflacionaria es una tarea compleja que requiere un enfoque dinámico y adaptativo, muy diferente al de una economía estable. La relación entre un plan de negocios exitoso en este contexto y el crecimiento económico del país en términos de producción total de bienes y servicios (Producto Interno Bruto –PIB-) es bidireccional, debe ser una hoja de ruta altamente dinámica y sensible a las condiciones macroeconómicas. No solo debe proyectar la viabilidad financiera bajo escenarios inflacionarios, sino también considerar cómo el crecimiento o la contracción del PIB afectarán la demanda de sus productos y la disponibilidad de recursos (financiamiento, insumos, talento). La clave es la adaptabilidad, la gestión de riesgos y la búsqueda de nichos de mercado que puedan prosperar incluso en un entorno desafiante, aprovechando cualquier señal de estabilidad o crecimiento, por incipiente que sea.

Ahora bien, en una economía inflacionaria las herramientas económicas y financieras que permitan analizar las viabilidades, sostenibilidad y rentabilidad del plan de negocios, se clasifican por su función, iniciando por las herramientas para el análisis de mercado y viabilidad, conocidas como, el análisis FODA, que permite identificar fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas internas y externas del negocio. Esta es una herramienta cualitativa, pero fundamental para comprender el contexto; por otra parte, tenemos el análisis PESTEL, donde se evalúan los factores políticos, económicos, sociales, tecnológicos, ecológicos y legales que pueden afectar al negocio. Ayuda a entender el macroentorno; después tenemos la investigación de mercado, en fuentes primarias, a través de las encuestas, entrevistas, grupos focales para obtener información directa de clientes potenciales, o fuentes secundarias, con informes sectoriales, estadísticas gubernamentales, estudios de asociaciones, publicaciones especializadas; al igual que, con la herramienta de análisis comparativo conocida como Benchmarking, para estudiar las mejores prácticas y el desempeño de la competencia para identificar oportunidades de mejora y diferenciación; en el siguiente, continuamos con el análisis de las cinco fuerzas de Porter como estrategias empresariales, para evaluar la intensidad de la competencia en una industria (amenaza de nuevos entrantes, poder de negociación de proveedores, poder de negociación de compradores, amenaza de productos sustitutos, rivalidad entre competidores existentes).

Dentro de esta misma idea, el propósito que se persigue mediante los análisis propuestos es determinar o medir las cantidades y las condiciones en que una economía puede y quiere poner a disposición del mercado un bien o servicio. En otras palabras, al utilizar estas herramientas de manera sistemática, se puede construir un plan de negocios sólido que no solo presente una idea, sino que también demuestre su viabilidad económica y financiera, lo cual es crucial para atraer inversionistas y asegurar el éxito del emprendimiento. Por lo tanto, se hace necesario estudiar otras herramientas, como lo son, en segundo lugar la estructura de costos y precios, empezando con la clasificación de costos, es decir, costos fijos, que no varían con el nivel de producción (alquiler, salarios administrativos, seguros), o costos variables, que varían directamente con el nivel de producción (materia prima, mano de obra directa, comisiones por ventas), o costos semi variables, que tienen un componente fijo y uno variable.

De ahí que, el punto de Equilibrio (Break-Even Point) nos permite calcular la cantidad de ventas (en unidades o en valor) necesarias para cubrir todos los costos, sin obtener ni pérdida ni ganancia, mediante la fórmula: Punto de Equilibrio (unidades)=Costos Fijos Totales/(Precio de Venta por Unidad−Costo Variable por Unidad). Sobre todo, es importante el cálculo de precios, basado en costos (Cost-Plus Pricing), al añadir un margen de beneficio al costo total del producto o servicio; o basado en la competencia, al fijar precios en función de lo que cobra la competencia, o basado en el valor percibido por el cliente, al fijar precios según el valor que el cliente asigna al producto o servicio; por último, la estructura de capital, al determinar la combinación óptima de deuda y capital propio para financiar el negocio. Es la forma en que una empresa decide financiar sus inversiones, utilizando recursos propios (capital contable) y recursos ajenos (deuda).

En tercer lugar, tenemos herramientas para la proyección financiera, tales como: Proyección de ventas, Estado de Resultados Proyectado (Pro Forma IncomeStatement), Balance General Proyectado (Pro Forma Balance Sheet), Flujo de Caja Proyectado (Pro Forma Cash FlowStatement), análisis de sensibilidad y análisis de escenarios. Asimismo, en cuarto lugar, tenemos herramientas para la evaluación de proyectos de inversión, tales como: Valor Actual Neto (VAN o NPV), Tasa Interna de Retorno (TIR o IRR), Período de Recuperación (PaybackPeriod), Relación Beneficio/Costo (Benefit-Cost Ratio); y como quinto lugar, nos encontramos con herramientas complementarias, tales como Software de Hoja de Cálculo (Excel, Google Sheets), Software de Contabilidad, modelos de plan de negocios prediseñados, asesoría financiera y contable, y por último simuladores de negocios.

Por consiguiente, integrar estas herramientas en la estructura de un plan de negocios en una economía inflacionaria como la venezolana no puede limitarse a describir el cumplimiento de leyes estáticas. Debe incorporar una estrategia proactiva de adaptación y gestión de riesgos legales y regulatorios, respaldada por una asesoría de expertos en planificación de negocios y gestión financiera y una vigilancia constante del entorno normativo. La viabilidad del negocio dependerá en gran medida de su capacidad de resiliencia financiera, la gestión eficiente de costos y la adaptación ágil a las fluctuaciones del mercado para desarrollar estrategias que permitan minimizar riesgos y maximizar oportunidades en estas condiciones económicas.

A diferencia, en un escenario de inflación, se producen subidas en los precios de forma súbita, afectando a todos negativamente, porque normalmente las fuentes de ingresos no suben en igual medida, lo que provoca una pérdida del valor adquisitivo; por ejemplo, si tu salario sube el 10 %, pero sales a comprar y todo es 20 % más costoso, por analogía, es como si te hubieran bajado el salario, ya que solo puedes comprar menor cantidad de cosas con tu salario. De modo similar, impacta en los negocios al ser un escenario complejo, y tener una relación con el crecimiento económico, medido por el Producto Interno Bruto (PIB), que representa la producción total de bienes y servicios de un país.

En consecuencia, el impacto de la inflación en el crecimiento económico es de total incertidumbre y desincentivo a la inversión, motivado a una inflación muy alta y volátil, lo que desincentiva la inversión productiva a largo plazo, ya que las empresas no pueden planificar con certeza sus costos e ingresos futuros. Esto frena el crecimiento del PIB. Por otra parte, existe una distorsión de precios, la inflación distorsiona los precios relativos, dificultando la asignación eficiente de recursos en la economía. Las empresas pueden invertir en lo que parece rentable por efectos inflacionarios, no por una demanda real o eficiencia. Sin duda, una caída del poder adquisitivo, donde la inflación contrae la demanda agregada (consumo), afectando la producción y el crecimiento del PIB. Por último, un deterioro de la balanza de pagos, que se ve reflejado en los costos de producción que aumentan por la inflación, generando que los productos nacionales pueden volverse menos competitivos en los mercados internacionales, afectando las exportaciones y la producción.

En síntesis, un plan de negocios es un documento estratégico que detalla los objetivos de una empresa, ya sea nueva o existente, y las acciones necesarias para alcanzarlos. Sobre las bases de las ideas expuestas, en una economía inflacionaria, el aumento de los precios presiona las ganancias y reduce el poder adquisitivo, dejando una evidencia muy simple, está en riesgo la rentabilidad. En definitiva, la inflación representa el aumento generalizado y sostenido de los precios de bienes y servicios, provocando, que los costos suban, las empresas enfrentan mayores gastos operativos, menos capacidad de inversión y la mayoría de las veces trasladar esos costos al consumidor, lo que se refleja en la reducción de su competitividad. Para Alcalá 2004, en su libro “El poder para lograr lo que quieras”, encontrarás las cinco fuerzas del poder personal, la pasión, la oportunidad, la decisión, la energía y los recursos para poder encender la motivación que le llevará a aumentar su productividad y, por ende, a elevar su calidad de vida.

¡Quieres recibir el periódico en la puerta de tu negocio!

1 Mes

  • 3 Ejemplares semanales
  • Entrega gratis (Delivery)
  • Aviso impreso 2×5
  • Descuento del 5% en publicidad Digital
  • Osequio de Instagram
    1 Post 1 historia

Mensual
54.000 Cop

Pago único

Suscribirse

3 meses

  • 3 Ejemplares semanales
  • Entrega gratis (Delivery)
  • Aviso impreso 2×5
  • Descuento del 10% en publicidad Digital
  • Osequio de Instagram
    1 Post + 1 historia
  • Descuento del 5%

Mensual
51.300 Cop

Pago único

Suscribirse

6 meses

  • 3 Ejemplares semanales
  • Entrega gratis (Delivery)
  • Aviso impreso 2×5
  • Descuento del 20% en publicidad Digital
  • Osequio de Instagram
    2 Post + 1 historia
  • Descuento del 5%

Mensual
48.600 Cop

Pago único

Suscribirse