Jóvenes lideres se reúnen en simulacro de la ONU: el futuro está en tus manos
28 de abril de 2024
Se trata es de dejar el presente, junto al pasado, en el pasado; dicho
de otra forma, se trata de superar esta 5ta República, para dejarla
junto con la mal llamada 4ta República en el pasado.
Tenemos que entender cuáles errores hemos cometido como dirigentes
políticos, sociales, empresariales, sindicales, de medios de
comunicación, entre otros, para no repetir la misma historia y evitar
entrar en un ciclo de errores que nos traigan siempre a lo mismo.
El militarismo, el populismo, el partidismo, el socialismo, el Estado
interventor en la vida social y económica, el Estado por encima de los
derechos ciudadanos y económicos, el rentismo, el burocratismo, el
odio como política, el centralismo, el presidencialismo, el
caudillismo civil y militar, las políticas proteccionistas que aúpan
al empresario maula sin competencia, el culto a la personalidad. Todo
esto y muchas cosas más deben quedar muy atrás de la nueva sociedad
que tenemos que proyectar; para dar paso a la modernidad fundada en la
calidad de vida, en el conocimiento y avance tecnológico de última
generación a la orden del ciudadano, en el liderazgo con preparación y
capacidad, envueltos en la cultura que para comer hay que trabajar y
que ese trabajo sea digno y el salario dignifique las condiciones de
plenitud de la familia; con autonomías para los estados en la
concepción real de estado federal, donde el derecho a la libertad esté
por encima del Estado, donde la libertad económica esté por encima del
Estado, donde toda la población genere riqueza y la distribuya a sí
misma, donde el acceso a medicamentos y alimentos sea libre, donde el
valor de la cédula de identidad sea el único que identifique a los
venezolanos. Donde la educación sea de conocimientos amplios y no de
información; erradicar los pensamientos necrofílicos del marxismo de
las universidades, nido del fracaso latinoamericano. La necesaria
conformación de partidos descentralizados y profundamente democráticos
con relaciones ciertas con los sectores; donde la participación social
no sea secuestrada por el partidismo y no se convierta en la expresión
gremial en mecanismos de control social por parte de los partidos.
El momento actual en Venezuela exige una ruptura con el chavismo
militarista que el Psuv facilitó en la emboscada cívico militar.
No puedo consentir la participación de exfuncionarios civiles y
militares chavimaduristas responsables de esta crisis, ahora haciendo
causa común con la sociedad opositora y los partidos. Ello no es una
demostración de unidad, es un mensaje equivocado conforme al cual una
parte de chavismo no es responsable de lo que sucede y con ello tratar
de evadir culpas y prolongar la vida política en otros escenarios. Es
la justificación adelantada de que el proyecto no era así y alguien lo
desvió. Cuidado y la oposición termina impulsando un cambio de Maduro
por otro del mismo sector prevalido de que ahora todos estamos en la
misma idea.
No puedo consentir que se le pida al Gobierno condiciones mínimas de
participación electoral cuando las causas por las cuales el venezolano
emigra en éxodo masivo son de carácter económicas. El venezolano no
emigra por falta de condiciones electorales, emigra porque no hay
condiciones de vida. Entonces, la lucha tiene que ser por hacer
retroceder al Gobierno en las políticas que causan esa diáspora y así
luchar por el derecho que el Gobierno le eliminó al ciudadano. No se
trata de seguir pidiendo un canal humanitario, se trata es de defender
el derecho a la salud, a la vida, a los servicios de salud y a la
alimentación, por vía de la producción nacional; hacerlos retroceder,
de que cambien sus políticas para avanzar con músculo al cambio final
con la salida.
Peligrosamente nos acostumbramos a pedir mínimas condiciones, sabiendo
que el resto es trampa. Estos petitorios son una entrega de nuestros
derechos que los proponentes se niegan a organizar para defenderlos.
Organizarse para pedirle al régimen condiciones electorales y no
organizarnos para exigir nuestros derechos al trabajo, salud, salario,
alimentación, es dejar al ciudadano a su propia suerte, sin darle la
posibilidad de que sume su esfuerzo a uno mayor de reivindicar sus
derechos. Solo así se queda luchando; lo contrario es irse cansado de
esperar condiciones electorales que tampoco llegan. (Carlos Casanova Leal)
Negociación simétrica desde la perspectiva Mariana
28 de abril de 2024
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