En los actuales momentos que vive el país, la dirigencia política nacional debe establecer prioridades en su accionar y el número uno de ellas debe ser exigir el plan de vacunación contra el covid-19, para salvar a las familias venezolanas, a la población que sufre en cada barrio, en cada caserío, en cada rincón de la geografía nacional, señaló el dirigente de Voluntad Popular, Fernando Márquez.
“La vacunación no debe tener tintes políticos y debe ser ofrecida a cada venezolano sin distinciones. Hemos visto cómo se están aprovechando de la vacunación para que solo una clase política y una sola élite tengan la oportunidad de salvar sus vidas y la de sus familias”.
Ante esa situación, Fernando Márquez se preguntó ¿qué pasa con ese venezolano de a pie que quiere salvarse y echar para adelante al país? No tiene posibilidades porque existe discriminación y una violación sistemática de los derechos fundamentales y constitucionales, y es por esto que urge un acuerdo inmediato por parte de la dirigencia política nacional.
Es necesario diseñar un plan de acción en el que la dirigencia nacional eleve su voz para demandar un plan de vacunación real que permita salvar la vida de tantos venezolanos que sufren la pandemia en los hospitales, sin insumos médicos para salvar sus vidas, y aquellos que sufren en las cárceles, además por falta de alimentos.
Para lograr este avance, el dirigente de Voluntad Popular (VP) señaló que se requiere de madurez política para lograr conseguir el objetivo de un plan de vacunación que permita salvar la vida de muchos venezolanos.
“La vacunación no puede negociarse y es un punto de honor que la dirigencia política debe trabajarlo con la Iglesia, con las ONG y la comunidad internacional, para que se llegue a un acuerdo y salvar tantas vidas que están en peligro”.
Condiciones electorales
De acuerdo al político tachirense, es necesario destrancar un juego político que se ve en jaque: “no se ve para que gane el régimen, y tampoco un triunfo de la alternativa democrática”.
“Se debe conseguir una ruta que salve al país y nos permita tener condiciones electorales reales, donde los venezolanos sientan que su opinión vale la pena para agilizar un cambio verdadero y una transición política hacia la libertad y de esa manera rescatar la república”.
Las condiciones electorales idóneas las define Fernando Márquez, como una observación internacional calificada, depurar el registro electoral, veedores, no solo internacionales, además que sean calificados, para permitir un órgano electoral en el que el pueblo sienta una verdadera confianza en el voto, como instrumento para cambiar la realidad que vive Venezuela.
“A la verdadera oposición le secuestraron sus símbolos, su bandera y le arrebataron la posibilidad de ejercer cargos políticos través de sus tarjetas y símbolos. Lo que quiere decir que el régimen colocó una posición a su medida para que sean ellos quienes pongan los candidatos de la alternativa democrática”.
Desde diciembre de 2020, cuando se celebraron las elecciones a la Asamblea Nacional, hasta entonces, algunas condiciones electorales pudieron haber mejorado, pero no lo suficiente para llamar a ese acto ejecutado, elección, explicó Márquez.
El dirigente político precisó que el régimen venezolano ha usado 14 veces las mesas de negociación y diálogo para tomar oxígeno y tiempo y así establecer el objetivo que ellos tienen: la transición de la República hacia el Estado social comunista.
“La gente habla muy libremente del Estado comunal sin agregarle la dosis de temor que esto lleva: una ideología perversa detrás de una transnacional criminal peligrosa que puede destruir completamente el modo de vida, la libertad individual y la propiedad a las familias venezolanas”.
Con el Estado Comunal se pretende establecer un nuevo marco jurídico que se concreta a través de las ciudades y parlamentos comunales, arrebatando las competencias a la municipalidad y gobernaciones del país, para tener un sistema político territorial descentralizado.
Tener una misma bandera de lucha que se centre en alcanzar la libertad para los venezolanos, y restablecer las instituciones republicanas, es el norte y por ello se debe estar atento y mostrar seriedad ante lo que se vaya a hacer en medio del Acuerdo de Salvación Nacional, propuesto por la Asamblea Nacional (2015).
“A la gente se le debe hablar con claridad y explicar cada paso que se dé para que los venezolanos no se sientan traicionados, sino acompañados por una dirigencia política que, en medio de esta crisis intencional e inducida, pueda ser capaz de dirigir un destino distinto para Venezuela.
Recalcó la necesidad de llegar a una negociación seria con la comunidad internacional que permita destrancar el juego político y detener el sufrimiento por la crisis inducida, provocada por el régimen, que tiene padeciendo a los venezolanos. Ningún país se había logrado destruir intencionalmente, como ha sucedido en Venezuela.
“Las dirigencias regionales de cada organización política y sectores de la sociedad civil deben llegar a un acuerdo y tomar decisiones en unidad, pero no una unidad forzada, sino funcional y con un concepto claro, que sea salvar la República y rescatar a Venezuela”.
Rosalinda Hernández