Regional

Anna Vaccarela trae un mensaje motivador

30 de octubre de 2023

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Freddy Omar Durán

Para contarnos su experiencia de vida y cómo ella se constituye en ejemplo ante las circunstancias más difíciles, la periodista Anna Vaccarella tendrá una cita muy especial con los tachirenses en un evento en la parroquia Santísima Trinidad, de Pirineos II.

Esta actividad a desarrollarse el 11 de noviembre busca recaudar fondos para la labor social desarrollada por la fundación Monseñor Roberto Arellano y de la parroquia Santísima Trinidad.

Anna Vaccarella no solo ha sido una reconocida dama de los medios de comunicación nacionales, también sembró una cadena de solidaridad a su favor cuando padeció fuertemente los rigores del cáncer, los cuales favorablemente pudo sortear.

Durante el programa Perfiles de Mi Tierra de La Nación Radio, la periodista Haydee Useche, como parte del comité organizador del evento, dio detalles de la actividad y de la personalidad que la protagoniza. Se espera que con lo recaudado se refuerce la acción de consultorios solidarios, que en estos momentos dirige el sacerdote Miguel Duque.

— Este evento tiene una razón social: la parroquia Santísimo Salvador tiene una labor extraordinaria, que se puede ver en su cuenta de Instagram. A esta comunidad eclesiástica de la Diócesis de San Cristóbal perteneció el presbítero Roberto Arellano, el sacerdote que rogaba por tantos enfermos y trabajaba por acercar esa misericordia de Dios y ese poder sanador de Jesucristo a tantos corazones y almas necesitadas— declaró Useche.

Mensaje de esperanza

A finales de septiembre pasado, Anna Vaccarella, como imagen del Grupo Cobeca, participó en un evento empresarial en San Cristóbal, y adelantó algo de ese mensaje de esperanza que impartirá el 11 de noviembre.

“Será una conferencia para inspirar, para motivar, para impulsar a las personas en este reto diario de vivir la vida con alegría, con entusiasmo, más allá de la adversidad, más allá de las frustraciones, más allá de estos retos que cada día parecen más grandes y que a veces atentan contra nuestra paz espiritual”, expresó.

Puso al pueblo tachirense como ejemplo de la actitud positiva ante las adversidades, y ante el que no escondió su profunda admiración:

“Lo que tengo es admiración para un pueblo como el tachirense, que la está pasando duro, pero que no se rinde, y esa es la esencia del venezolano. No estamos hablando de resignación, estamos hablando de aceptar lo que no podemos cambiar, y cambiar todo aquello que sí está en nuestras manos para echar adelante, para luchar por nuestro país y avanzar un poquito más”.

Para la comunicadora, la rendición no constituye opción alguna, en tanto nos cierran las perspectivas de las grandes posibilidades que nos ofrece la vida.

“Vale la pena luchar; y si no, ¿qué hacemos? Nos rendimos. Y al rendirse, ¿qué viene? La inacción, la frustración, la tristeza, la ira. Las situaciones difíciles requieren de mucha estrategia, de mucha inteligencia y requiere una mayor agudeza”.

Desde hace 6 años está dando conferencias, y la primera surgió a partir de todo el proceso de sanación del cáncer y su trasplante de médula. Esta ha sido una oportunidad de aportar un granito de arena y comunicar ahora en noticias positivas que van al corazón de la gente y para invitar a valorar el gran milagro de la vida, más allá de lo que pueda ocurrir.

Luego de “renacer” después de una larga lucha contra el cáncer, se consideró en la necesidad de compartir todos esos elementos que le proporcionaron la fortaleza para superar tal situación.

“Gracias a la divina misericordia de Dios estoy acá, sana, y después de todo ese largo momento de oscuridad puede entender el valor de la luz y me transforme en una persona que valora cada cosa de su vida, que es un milagro, que podamos respirar, que podamos movernos, y podamos pensar. Y si todo eso lo vemos desde el agradecimiento, cambia tu actitud y tu manera de ver los problemas”.

Para ella, ese difícil momento es un momento de aprendizaje; más aún, es el momento en que realmente la vida nos da las lecciones más inolvidables; una de ellas: Nada se gana sin esfuerzo.

“La fe y poner mucho de parte de mí ayudaron en mi recuperación. Cuando uno atraviesa momentos tan difíciles y se pone en riesgo seguir estando, eres como un metal fundido que la misericordia de Dios va amoldando; y si no aprendes con esto, no aprendes con nada. Se trata de esmerarse, porque nada es mágico, todo implica trabajo y esfuerzo de parte de uno”.

Para mayor información comunicarse con el número telefónico 0414-7070419 o @IglesiaSantisimaTrinidadSC

 

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