Regional
Continúa triunfando la Orquesta que impone el ritmo en Venezuela
14 de julio de 2025
En Venezuela se respiraban aires de democracia y libertad el 15 de julio de 1958 tras caer la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, cuando un joven audaz y amante de la buena música, Renato Capriles, nativo de Puerto Cabello, estado Carabobo, presentaba a su agrupación musical titulada Los Melódicos y cuyo lema que se mantiene a través de casi siete décadas, siguen siendo: “La orquesta que impone el ritmo en Venezuela”.
La agrupación, que alcanzó incluso el Récord Guinness por haber grabado cien discos de Larga Duración en el menor tiempo posible, se convirtió muy pronto no solo en la alternativa de la tradicional Billos Caracas Boys de Billo Frómeta, sino en la agrupación musical que estuvo animando desde su génesis los grandes bailes de la Feria Internacional de San Sebastián.
Incluso fue aquí, en el Táchira, donde rompió otro récord: el de tener que repetir por más de veinte veces el tema “El Pompo” durante una fiesta en la Feria de Táriba con motivo del festival en homenaje a la Virgen de la Consolación.
En los años dorados de la agrupación, dieron la vuelta hemisférica en los grandes escenarios que los llevó con sus celebrados temas a casi todos los países de Latinoamérica, a varias ciudades de los Estados Unidos y a diversos escenarios de Europa, destacándose en los celebrados Carnavales de Tenerife en las Islas Canarias del país ibérico.
Con Renato Capriles, la alegría reprimida del pueblo que sufrió diez años de férrea dictadura soltó amarras y bailó con los temas más aplaudidos de Los Melódicos, por donde transitaron las emblemáticas voces de: Víctor Piñero, Germán Vergara, Emilita Dago, Manolo Monterrey, Rafa Galindo, Verónica Rey, Perucho Navarro, Liz, Roberto Antonio, Diveana e inclusive el tachirense Omar “Caraota” Ferrer, que rompieron los cánones de la canción tropical y bailable y los llevaron por Barranquilla, Cartagena, Bogotá, Quito, Lima, en esta parte del hemisferio y a ciudades como Miami, Boston, Nueva York en Norteamérica, llenando de orgullo a los venezolanos por contar con el equipo de músicos y cantantes que ahora enarbola en su dirección Iliana Capriles, hija del recordado maestro.
Renato nació el 28 de diciembre de 1931 en la localidad de Puerto Cabello, estado Carabobo, y falleció el 8 de julio de 2014 a la edad de 82 años, rodeado de sus hijas, amigos y demás seres queridos, dejando una estela de gratitud en toda Venezuela, a la que puso a vibrar a través de sus ritmos que entregaba en formato de LP dos veces por año, y que eran esperados por todo el país.
Aquí, en San Cristóbal fue la agrupación obligada de animar los grandes bailes feriales a través de los clubes y casetas, alternando con su eterno rival la Billos Caracas Boys y sus populares “mano a mano” que hasta el amanecer colmaron de alegría y entusiasmo a todos los habitantes de esta región andina en donde siempre estuvo presente para animar sus mejores acontecimientos.
Y a pesar de los nuevos giros musicales que imperan actualmente, sigue la Orquesta Los Melódicos mandando más que un dinamo para animar como siempre los bailes de entusiasmo y alegría en cuanto evento se presenta en el país.
Renato Capriles, amigo de los comunicadores sociales
El maestro Renato Capriles, fundador de la gran orquesta Los Melódicos, tuvo amigos por doquier durante las giras internacionales que hizo por Estados Unidos, Latinoamérica y Europa, y se distinguió por sembrar y cosechar amigos en ambos continentes, sobre todo entre los comunicadores sociales.
Así, fortaleció una empatía amical abiertamente con periodistas del espectáculo, locutores y afines, a quienes, sobre todo en el Táchira, agasajaba con sus formidables cenas con ellos, llevadas a cabo durante sus visitas a los bailes de la Feria Internacional de San Sebastián.
La mayoría de los distinguidos como sus amigos recibían además sus saludos especiales a través de esquelas, por cumpleaños, por Navidad y Año Nuevo, tarjetas de felicitación que han quedado para el recuerdo en memoria de este magnífico músico que tanta alegría repartió a través de su agrupación por buena parte del mundo.
Incluso, invitó a varios de ellos a que le acompañasen a sus giras por el continente americano como por Europa, como fueron los casos del colombiano Edgar García Ochoa, que lo llevó hasta Boston, Estados Unidos, o el venezolano Omar G. Pérez, que escribía para El Carabobeño y La Nación, por toda España.
Victor Matos