Regional

No contento con la Luna, el hombre quiere llegar a Marte

21 de julio de 2025

11 vistas

Víctor Matos

El 20 de julio de 1969, el planeta Tierra se paralizó. Millones de sus habitantes vieron con asombro a través de la transmisión directa por la televisión cómo por primera vez el hombre pisaba el satélite lunar, luego de haber viajado por tres días hasta lograr tan inmenso cometido, que puso a los Estados Unidos a la cabeza de la lucha por la conquista espacial que mantenía con la Unión Soviética.

Ahora, tras los avances de los vuelos al espacio, están llevando robots al planeta Marte como buscando un refugio si alguna hecatombe como los cambios climáticos o una guerra nuclear pusiera fin a la vida en el planeta.

Pero fue ese 20 de julio de hace 56 años cuando ocurrió la hazaña de los astronautas Neil Armstrong y Buzz Aldrin cumpliendo felizmente con la Misión Apolo 11 que se convirtieran en los primeros en pisar la superficie selenita, simbolizando así el gran avance científico y tecnológico para la humanidad.

“Un pequeño paso para el hombre, un gran salto para la humanidad” fueron las célebres e históricas palabras pronunciadas por el comandante de la misión, Neil Armstrong, que quedarán fundidas para siempre en la historia universal.

El Apolo 11, impulsado por un cohete Saturno V diseñado por el científico de origen alemán Werner von Braun, estuvo tripulado por Armstrong como su comandante, de 38 años de edad; Edwin “Buzz” Aldrin de 39 años y Michael Collins de 38, este último piloto del módulo de mando.

El comandante Armstrong pisó la superficie selenita al Sur del Mar de la Tranquilidad, marcando allí el hito histórico que le diera fama eternamente, y que regresara feliz por la misión cumplida junto a sus compañeros, cuatro días después, el 24 de julio, tras un perfecto amerizaje realizado en aguas del Océano Pacífico, cumpliendo así una gira emprendida desde Cabo Cañaveral en el estado de la Florida el 16 de ese mismo mes en cumplimiento del Programa Apolo, que dejó  muda a la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas que hasta ese momento abanderaba la conquista del espacio.

Incluso, las autoridades moscovitas regaron el rumor que la llegada a la Luna no se había producido y que las imágenes difundidas eran grabaciones trucadas filmadas en algún estudio de Hollywood, lo que causó mucha risa en el mundo occidental, en donde por fanatismo o ignorancia, compraron algunos adeptos al partido comunista soviético.

Hoy en día, los cohetes interespaciales salen sin problemas de la estratosfera terrestre, unos con rumbo al Planeta Rojo, Marte, en busca de refugios habitables por si por alguna desgracia la Tierra desaparece y los que tengan los recursos necesarios puedan mudarse a otro lugar en sus ansias de eternizarse como seres vivientes.

Sea lo que fuere y lo que nos depare el futuro, lo cierto es que el alunizaje producido por la capacidad científica norteamericana, ahí está y quedará para el consumo del estudio de todas las generaciones que vengan.

De la Alemania Nazi a la conquista espacial

El experto alemán Werner von Braun fue un ingeniero mecánico y aeroespacial, que fuera miembro del partico Nazi alemán en la Segunda Guerra Mundial, y jefe del diseño del cohete V2 germano que en 1944 se convirtió en el misil más letal que castigó permanentemente a Londres, la capital del Reino Unido.

Cuando la Alemania de Hitler veía irremediable la derrota del conflicto bélico con los aliados (Estados Unidos, Inglaterra, Unión Soviética), Von Braun logró un acuerdo con las fuerzas norteamericanas y junto con unos quinientos científicos, lograron llegar a los Estados Unidos, en donde el brillante profesional se integró a la NASA, se nacionalizó norteamericano en 1955 y fue el diseñador jefe de los cohetes inter espaciales, empezando por el exitoso Saturno V que llevó a los astronautas americanos a la conquista de la Luna.

Murió a la edad de 65 años en la localidad de Virginia, dejando un legado que quedará para la historia aeronáutica mundial luego que sus famosas bombas V2 hicieran estragos tanto en la capital británica como en Amberes, Bélgica, que lanzara el ejército alemán logrando importantes objetivos en el inicio de la era supersónica, por lo que logró devastar varias localidades con las 1.155 bombas que usaron las fuerzas nazis en vísperas de la culminación de la II Guerra que se desarrolló entre 1939 a 1945 y tuvieran como mira de destrucción a Londres, y 1.625 que tocaron a Amberes.

Su entrega acordada con las fuerzas norteamericanas marcó un hito que llevó a ese país a convertirse en el adalid por la conquista del espacio que lidiaba con la Unión Soviética.

Víctor Matos

¡Quieres recibir el periódico en la puerta de tu negocio!

1 Mes

  • 3 Ejemplares semanales
  • Entrega gratis (Delivery)
  • Aviso impreso 2×5
  • Descuento del 5% en publicidad Digital
  • Osequio de Instagram
    1 Post 1 historia

Mensual
54.000 Cop

Pago único

Suscribirse

3 meses

  • 3 Ejemplares semanales
  • Entrega gratis (Delivery)
  • Aviso impreso 2×5
  • Descuento del 10% en publicidad Digital
  • Osequio de Instagram
    1 Post + 1 historia
  • Descuento del 5%

Mensual
51.300 Cop

Pago único

Suscribirse

6 meses

  • 3 Ejemplares semanales
  • Entrega gratis (Delivery)
  • Aviso impreso 2×5
  • Descuento del 20% en publicidad Digital
  • Osequio de Instagram
    2 Post + 1 historia
  • Descuento del 5%

Mensual
48.600 Cop

Pago único

Suscribirse